Mi vida errante

cha cháaaan

jueves, julio 31, 2008

Cabello

Así desperté ayer.

Así me fui a trabajar ayer.Así desperté hoy. Como puede verse, aún no estaba ni medio despabilado al tomarme la foto.

Y así llegué de trabajar.

Pues hoy fui a cortarme el cabello. Salí de trabajar y fui a una peluquería que había visto un día. No era donde creí. Caminé otra cuadra. La idea era raparme. Como no veía la peluquería, pensé "no voy a pagar 70 pesos por que me rapen y tampoco voy a estar mucho rato buscando una peluquería". Decidí venir a mi casa. Crucé una cuadra y encontré la peluquería. En la caminata como que dudé, pero ya al ver la peluquería me metí con toda la decisión. Esperé mi turno y me senté en la silla.

Pedí que fuera con el peine cero. Quizá debi decir que con el peine uno, para que fuera como una alfombra, y mi cabeza no sonara chistoso al golpearla. En fin, son como 3 mm de diferencia. No importa.

Me rapé apenas más de lo que quería (a esas alturas ya no hace diferencia, pues).

Si "lo que en esta vida hacemos, en esta vida pagamos", entonces habrá alguien que de cuando en cuando me dará zapecitos (zapes suaves) sólo para oir el gracioso sonido de mi cabeza.

Cuando salí de la peluquería, sentí el aire en la cabeza. Jamás lo había sentido así. Cuando me rapaba en otro tiempo, era con el peine cinco o cuatro (no recuerdo cuál). Se siente chistoso. Debo acostumbrarme a mi sombra y a mi reflejo, por cierto. Que a uno le corten el cabello así se siente un poco como cuando lo trae largo y se lo cortan para que se vea "decente".

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lunes, julio 28, 2008

Otra entrada multitemática

6. El fin de semana se subió al camión uno de esos quiénsabequesean que caminan por el mundo, creo que sí era mujer. Era gordo y tenía bigote, pero traía falda y cabello largo. Digo, la falda y el cabello no son un indicador claro, pero realmente no supe si era un gordo trasvesti o una gorda que parecía vato. Se veía triste. El rostro tampoco ayudaba mucho, pues la obesidad deforma la cara. Supongo que nunca sabré. Quizá era trasvesti. Si era mujer, pobrecilla igual.

9. Llevo muchos muchos días sin rasurarme. A gente que le crece rápido llegaría a mi estado en como 4 días. Yo llevo como 15 ó más. Me da como flojera.

10. Finalmente algún usuario de youtube subió capítulos de La Vida Moderna de Rocko (Rocko's Modern Life). El fin de semana vi dos. Según vi, el escritor es el mismo que el de Bob Esponja. Siento que RML está más grotesca en sus partes grotescas. Increíble. De las pocas cosas que siempre he tenido presentes como favoritas y sin pensarle mucho.

11. Leí en wikipedia un poco sobre la vida de John Frusciante. La pasó mal. Podrían hacer una película sobre él.

12. Olvidé poner en la entrada de características: baila bien chido; tiene bonita sonrisa, pese a que sonríe poco; cuando rara vez dice bromas, hace un gesto chistosón. (recordemos, son ejemplos de características que me han parecido simpáticas, etc)

13. El trece "es de mala suerte".

14. Hoy oí todo "Contraband" de Velvet Revolver. Está chido. Algunas canciones parecían hechas para que las cantara Ax'l Rose, a mi gusto, pero igual está chido.

15. Pos el comentarista anónimo (supongo que anónima) no apareció de nuevo. Ni pedo. Supongo que nunca sabré(mos).

16. Hamlet tenía 30 años.

17. Mañana pretendo cortarme el cabello, a coco (bueno, casi, lo más bajo que se pueda sin usar navaja). Es una oportunidad. En otro tiempo hubo cosas que me detuvieron. Que si la foto; que si ay joil eso se ve mal; que si así no, gordo; que si tenía el cabello largo y ps había que aprovechar; que si te cortas el pelo no te lo cortes mucho mucho como luego le haces; que si va a tocar soda stéreo y hay que traerlo medio largo, pues para los héroes no había crecido. Ahora ya no hay nada. A NIN prácticamente no lo conozco, además que estar rapado también promueve la "actitud", pero no tanto como el cabello largo. Da igual, no creo verlo. Acaso se me antoja ver a plastilina mosh.

18. Había que ver, por cierto, la opinión de los ventiladores (fans) sobre que me rape, aunque igual no creo que haga diferencia. Sé alguna: "te vas a ver cagado" (cagado es chistoso en algunos lugares, por si alguen no lo sabe), que lo diría cualquiera de la banda que conocí en Córdoba. :P

19. Se supone que tengo "hoyos" en la cabeza, esto es, tengo poco cabello y hay regiones semivacías. Ya si se ve muy feo, compraré una gorra o algo, o no.

20. Compré un aceite de cocina donde sale ese vato que salía en algún anuncio de bimbo (creo que de bimbo), Alejandro Maldonado. Me puse a pensar si habrá gente que diga "ah, este es el bueno porque viene ese vato pegado", o "qué guapo sale, voy a comprarla", o "probablemente si compro este, me voy a poner mamado (fuerte) como él". La verdad es que yo lo compré porque el de oliva estaba muy por encima de los demás aceites, y había uno que según era más sano, pero costaba 10 pesos más, y pagar 40 pesos por aceite no se me hace chido, habiendo aceites de 15 (el capullo, por ejemplo). Entonces pensé "bueno, que tan más malo puede ser realmente".

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sábado, julio 26, 2008

Características

Esta entrada es bastante similar a esta otra, la de la presunta pareja. Pero como más específica quizá. En fin, la idea es decir cosas que me han gustado en alguna chica que alguna vez haya tratado, pues, en orden aleatorio (se repiten porque han sido en diferentes). En fin:

Tiene unas pestañotas; tiene bonitos ojos; me da risa; tiene abundante cabello; tiene el cabello chino; tiene una "sonrizota"; sabe de cosas que yo no sé y puedo aprender de ella; tiene una mirada peculiar bastante simpática; me da risa; siempre tiene algo que contar; una faceta más femenina que no le conocía y un día salió a flote, me sorprendió; es morena; tiene el pelo chino; es morena; habla chistoso; tiene una especie de sentido como maternal; es apasionada al discutir pendejadas; tiene una voluntad férrea; hace más que ir al café; sabe cocinar bien chido; de uno u otro modo como que me invita a ser mejor persona; me ha hecho pensar en cosas irrelevantes que me han movido a saber más de mis gustos, o de por qué hago algunas cosas como las hago; tiene una "sonrizota"; tiene una "sonrizota"; siempre tiene algo que contar; hace más que ir al café; hace más que ir al café; disciplina, igual y eso se pega; tiene los ojos como delineados; tiene sentido de "aventura"; tiene sentido de "aventura"; escribe como dios manda; hace más que ir al café; tiene un lunar bien llamativo (sexy); tiene bonita nariz; tiene un lunar bien llamativo (sexy).

El lado ñoño:
*Ojo, no es un conjunto porque los elementos se repiten.

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viernes, julio 25, 2008

Entrada Multitemática de Cosas Bastante Irrelevantes

1. El otro día vi, desde el camión, un señor con labio leporino. Tendría entre 65 y 75 años. Se había dejado el bigote. Se me ocurrió que quizá era para disimular, pero ps la neta no disimulaba nada. Bueno, eso o que probablemente alguien con labio leporino se pueda cortar más fácilmente.

2. El otro día me medio perdí en un camión. Apliqué esa sabia premisa de "bajarme donde se bajara la banda". La idea era ir a walmart. Tomé un camión y pues iba normal todo. En una de esas tomó un paso a desnivel y pensé "seguramente es para brincarse un jodido semáforo". El camión siguió andando, todavía medio en paralelo a Garza Sada, por atrás del parque Canoas. Sin embargo, llegó un momento en que dije "no, no parece que vaya a retomar el rumbo". Originalmente no lo había pensado porque nadie se bajaba (si nadie se baja es que nadie iba por ahí, de modo que podía haber sido el caso de que estuvieran esperando regresar a la avenida), la gente se empezó a bajar. Una tanda. En un momento vi un sitio de taxis, pero mejor me esperé. En la segunda tanda de gente me bajé. Subí a un taxi. Treinta y cinco pesos. Me salió cara la ida a walmart ese día (el camión, por cierto, era del mismo color y una ruta igual hacia el otro lado, pues desde el centro he notado que esos camiones con sus rutas paran en el mismo lugar, y en la ida, también llevan, creo, la misma ruta. Por otro lado, la ruta es parecida hasta el T*********o, se desvían en ese paso a desnivel).

3. Creo que fue el día que me perdí que una vez más corroboré que el pancho con el peinado más pancho que haya yo visto en Villahermosa, Córdoba o Veracruz, no se comparará nunca con los de más alto nivel que haya visto acá. Acá no es del todo extraño ver a vatos, a veces ya señorones, con mullet exagerado (vamos, muy rapados de los lados y con el cabello medio largo, incluso los hay que se rapan liso y se dejan otro poco de cabello largo). Pero ese día me tocó ver lo más raro, incluso rayaba en lo chistoso: un tipo que tenía un mechoncito en la nuca, de esos mechones pequeños que mucha gente se deja cuando se corta el cabello, no es extraño, un mechón del último cabello del centro de la parte trasera de la cabeza; la cuestión era que el tipo estaba rapado a coco y tenía ese mechón, y además, rizado. Chistoso, chistoso. Tenía un pequeño cuadrito en ese lugar de la nuca.

4. En el banco donde está afiliada la empresa no me ayudaron mucho. Llamé y el telefonista me dijo que fuera a la sucursal donde expidieron la tarjeta. Fui hoy. Le comenté el caso al de la ventanilla. Cambiamos mi nip: "listo, ya puedes ir a un cajero". Fui. No jaló. De nuevo metí la tarjeta. De nuevo no jaló. Regresé y me tocó en la ventanilla de al lado.

R-"bla bla bla acabo de cambiar mi nip y no jala"
B-"bla bla bla, ¿cómo que acabas de cambiarlo?"
R-"sí, hace cinco minutos, con él (y señalé al otro vato)"
B-"ah, pues deja veo. Ponlo en el teclado." (y me dio un tecladito).
B-"según esto, todo es correcto. Si quieres te saco varo de una vez"
R-"no, no, no quiero sacar dinero ahorita. Lo que quiero es poder usar la tarjeta"
B-"si quieres puedes disponer de tu dinero ahorita y te lo doy, ¿cuánto necesitas?"
R-"no, sólo quiero ver mi saldo"
B-"¿no sabes cuánto tienes? te puedo decir y sacas dinero"
R-"no, sí sé cuánto tengo, pero, pero no quiero sacar dinero. No es la idea, la intención es poder usar mi tarjeta".
B-"mmmm, pues todo está correcto. Si se la traga, vienes el lunes y..."
R-"no, no puedo venir el lunes, trabajo"
B-"Aaah. Ve al cajero y si hay problema, vas con mi compañero del escritorio. Yo no puedo hacer nada por ti."

Fui al cajero. No jaló. Fui con el del escritorio. Le conté.
B-"aaaaaah, si quieres, puedes disponer de tu dinero aquí en la ventanilla."
R-"Sí, y en Walmart, pero no es la idea. Lo que quiero es poder usar mi tarjeta."
B-"mmmmm, préstamela...Todo es correcto. Lo que puede pasar es que tu tarjeta no sirva. El nip se desactiva a la tercera."
R-"aaaaah, ¿y luego?"
B-"Pide otra a tu empresa. Todo coincide, puede ser que este rayón la haya dañado. Igual y la metiste en algún lado que le rayó la cinta."
R-"No, estaba en el sobre."
B-"Mmmmm, no pues yo no puedo hacer nada. Pide en tu empresa que te den otra."

En sí, eso fue más o menos mi conversación. Perdí el tiempo. Salí molesto. Sigo sin poder disponer de mi dinero en cajeros en ese cochino banco atlista. Me pagan el miércoles y seguramente seguiré teniendo que ir a walmart o a una ventanilla para sacar varo (aún no lo he hecho, walmart no me queda muy de paso y el cochino banco cierra a las 5).

5. Si una alguien que te gusta mucho te guiña el ojo, ¿qué haces?
a) Haces como que no pasó nada. (Tras una fracción de segundo de quedarte mudo)
b) Haces un chiste malo. (Tras una fracción de segundo de quedarte mudo)
c) Haces el "peor chiste malo para la ocasión": ¿Tienes un tic? (Tras una fracción de segundo de quedarte mudo)
d) Se te ocurre decir el "peor chiste malo para la ocasión", pero no lo dices y haces como que todo está normal. (Tras una fracción de segundo de quedarte mudo)
e) Te pones a llorar.
f) Culpas a los terroristas.
g) Eructas.
h) Verano en Mazatlán.
i) Alguna de las opciones entre la a y la d, pero sin la fracción de segundo (reaccionas inmediatamente, como acto reflejo). Especifique. ____
j) Te paras y te vas.
k) Otra. Especifique. ________________

7. El arroz que comí esta semana me quedó mejor que el que hice la semana pasada.
8. Voy a comprar una licuadora.

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jueves, julio 24, 2008

Caso Curioso: ¿teléfono descompuestísimo?, ¿gente de altos humos?

El otro día me encontré a una amiga en internet. Casualmente, apenas un rato antes, me había encontrado a su hermana (a la hermana la vi de lejos en su carro, me saludó y la saludé, no cruzamos palabra).

Me contó, mi amiga, que su hermana le había dicho que se encontró a una amiga mía (¿amiga mía?, ella sí es más bien una conocida, de ahí que dudara quién había sido) que le había dicho que: "yo no tenía empleo y le hablaba a ella para desahogarme."

1. Cierto, le hablé un día un poco harto porque estaba muuuuy aburrido: "Es que la neta no tengo naaaaaaaaada que hacer, porque ps ya acabaron las clases y pues no trabajo" (ya tenía empleo, pero empezaría un mes y medio después, para entonces andaba pasando la vida, y ya estaba un poco aburrido porque ya había tenido algún tiempo de vacaciones acá en Monterrey).

2. Quizá sólo llamé a la persona equivocada. De repente ves tu lista y dices "vive lejos, vive lejos, vive lejos, no está, ah, vive cerca y me cae bien, perfecto."

En algún momento se rompió la línea telefónica.

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miércoles, julio 23, 2008

Vacaciones: Veracruz

El Puerto



Llegué a Veracruz en lunes. La idea era estarme del lunes al viernes en la tarde en Veracruz, de ahí irme a Córdoba y salir de Córdoba para Villahermosa. En ese punto ya había notado la ausencia de mi constancia de vacaciones, de modo que me trabé un poco, pero bueno, ni modo. Fue lunes. No hice naaaada. Fui a casa del Barbas a ver el fútbol: Holanda 3, Italia 0. Lo acompañé a su escuela. Estaba Samantha. Regresamos todos juntos como hermanos al departamento del Barbas.

En la escuela estuvimos como una hora. Yo anduve pajareando, medio conociéndola, hasta que no hubo más que ver y decidí entrar a la cafetería a pasar el bochorno (hay aire acondicionado), a diferencia de todos los estudiantes, que preferían pasar el bochorno en la sombrita. Entiendo que luego se ponen pesados en la cafetería, o eso se me dijo, pero ps igual compraban unas galletas y salían a comérselas. Yo compré unas y me las comí adentro.

Regresé a la casa.

Martes

El martes sí no hice naaaaaaada, me desperté y tenía la intención de salirme a caminar tempranón, pero me topé con un partido. Lo vi. Comí, ya más tarde me fui a caminar por plaza las Américas. Estuve un ratote. Creo que ese día compré un par de camisas y un balón de fútbol baratón (la idea era patearlo en el terreno de mi papá, sólo porque hay harto espacio). En la noche cenamos y ya.

Miércoles

En la mañana anduve pateando el balón, hasta que tropezó con un clavo o algo similar entre una de las montañitas de escombro y se ponchó :( En parte fue mi culpa: de haberlo inflado a tope, quizá no se hubiera ponchado. Supongo que nunca lo sabré. Cumplió su cometido.

Ese día descubrí que el domingo era día del padre. Mis planes cambiaban, entonces. Decidí adelantar mi partida para el jueves y regresar para el festejo. Más caro, pero bueno. Nadie estaba conectado (nadie a quien pudiera pedirle asilo). Repentinamente entró El Camacho. Le dije y únicamente me pidió que le confirmara. Luis Zurita entró poco después. Igual me pidió que le avisara de algún modo (él estaba en Paso del Macho, pero me dijo que podría ir y dejar las llaves escondidas y regresar a su metrópoli).

En la noche fui a casa del Barbas. Habría una fiesta por su despedida (se iba del Puerto). El Barbas, contra todas las apuestas que la gente pudiera hacer, acabó hasta el moco de borracho. Lo mismo que un vato apodado "el Oaxaco". A esa hora ya sólo estaba el Oaxaco en casa del Barbas. Buen tipo. Fosilazo, pero buen tipo. Bajamos dejar al Oaxaco, que en su borrachera se cayó de las escaleras (como cuatro escalones). El tipo quería seguir chupando. Su intención era inflarle incluso solo.

La idea era quitarme tempranón, como a las 2. Estaba por irme: el Barbas salió y realmente no conocía (o conocía muuuuy poco) a la concurrencia. El vato me dijo que me quedara un rato, que no tardaba, otro vato me dijo lo mismo (buen tipo, por cierto, lo había conocido hacía dos días). No tardó mucho, pero se soltó una lluviecita (cuando escampe me voy). Siguió lloviendo un poco más fuerte "mmmmm, debí irme cuando lloviznaba, ahorita llueve feo, esperaré a que baje un poco. Se hacía más tarde y llovía más fuerte. Los finísimos vecinos de arriba empezaron a tirar sus bolsas de basura a la calle (costalitos). Desde el cuarto piso, creo. Finos muchachos.

Cuando bajó un poco la lluvia, el Barbas me acompañó a buscar un taxi, después que dejamos al oaxaco borracho y salvo en su departamento (no tan sano porque, como ya dije, se cayó). Los taxis no paraban o no me querían llevar. Finalmente uno se animó.

En el camino, la lluvia arreció feeeeeo de nuevo. No se veía nada. Me puse nerviosón, pero onfiaba en que el taxista la armaría. Llegué como a las 4 a la casa. Obviamente no me desperté temprano para ir a Córdoba.

Córdoba



El plan: ir jueves y viernes y regresar el sábado para la hora de comer. Así podría comprar un regalo del día del padre.

Jueves
Desperté y no mucho después, tenía un mensaje del fan#1. ¿Cuándo vienes? (le había dicho que iría). Le comenté que ese día, pero ps que me había topado con un partido de la Euro. Vi el partido. Me bañé, me vestí, comí y me lancé.

Casualidad: curiosamente, estaría en Córdoba con casi un año de diferencia (en esta ocasión, el viernes sería cumpleaños de la mamá de Ángeles, la vez anterior, viajé el día en que cumplió años la señora); aún más curioso es pensar que, aunque llegué un día antes a Córdoba, la diferencia era de 365 días: 2008 es año bisiesto.

Finalmente fui a la terminal. Llegué a Córdoba como a las 6. Avisé al fan#1 y a Rubén, y le hablé a Camacho (sí, olvidé confirmarle tanto al Camacho como a Luis Zurita). Rubén me dijo que nos veíamos en la gasolinera del T***C. Por alguna razón extraña (no es extraña, andaba distraído, supongo) le entendí que en la de Fortín. Obviamente me pareció raro que no llegara y le hablé. "No, te dije que en la del T***C" "aaaaah, bueno, ahora llego."

Acompañé a Rubén a hacer unas diligencias. Amablemente me llevó a casa de Luis Zurita. Él no había ido a Córdoba, yo no le había avisado, de entrada. Quedé con Camacho a alguna hora, lo vi, fuimos a su casa, me asignó un cuarto. Fui a cenar con Luis Medina y apareció (llegó) Chucho. En algún punto del tiempo anduve en casa de Luis Medina. Creo que fue antes de ir a cenar. Platicando con Rubén y Luis, les mencioné que quería ir al horrible Jot Roc.

Cenamos en la Braza. La banda no se había animado a ir al Jot, por lo que iríamos a Chiringuitos. Luis fue a hacer su tarea de valores. Llegaría luego. Chucho se pandeó justo llegando al Chiringuitos. La idea era el Chiringuitos porque "ellos trabajaban mañana y ps querían hacer algo tranquilo". Anduvimos ahí un rato. Llegó Luis. Llegó con una amiga suya (Ángeles, otra Ángeles, obviamente). En la plática, Ángeles dijo "¿Nadie quiere ir al Jot Roc?". Tanto tiempo como tarda el conductor de atrás en tocar el claxon, así tardó Rodrigo en decir "Simón, Yo". Ya para entonces estaba Tzitzihua también. Originalmente nadie quería ir. Rubén y Rocha irían a Xalapa al día siguiente, y creo que antes harían unas diligencias de trabajo. Tzitzihua "regresaría a la 1 a su casa (en Nogales)". Chomi entraba a trabajar a las 7. Al final fuimos. Sólo Chomi se abrió.

1. Tzitzihua llegó a su casa como a las 6 (tomando en cuenta que yo estaba en casa de Luis a las 526).
2. Dormí en casa de Luis en lugar de la casa de Camacho (a una hora decente, le dije a Luis que si me daba chance, porque realmente no sabía llegar bien a la casa de Camacho, y menos sabría a las altas horas, él amablemente me había dicho antes, pero ps yo ya había quedado con Camacho, además que por alguna razón me daba menos pena, creo que por el hecho de que se me hace más un punto como en el que vivo: la gente sólo llega a dormir, de ahí en fuera, trabajan todo el día; la casa de Luis es casa de Familia).
3. Poco después de acostarme a dormir, algún ojete se puso a pitar. No fue "la banda", después les pregunté. Me dio curiosidad, pero al no haber ventanas hacia la calle en el cuarto de la hermana de Luis, decidí dormir, mejor.
4. Obviamente no desperté tan temprano como quería y era imperativo que fuera al campus de donde me transferí a ver lo de la beca.

La pasé bien.

Viernes

Desperté como a las 930-10. La mamá de Luis nos hizo de desayunar. Me "lavé los dientes" con el dedo: mis cosas estaban en la casa de Camacho, por cierto. Obviamente no me bañé (mis cosas estaban en ...).

Fuimos a la escuela. Luis me acompañó.
1. Vi lo de la beca, con cara de desvelado, mi playera oliendo a cigarro y probablemente arrugadona (el recuerdo de Soda Stéreo).
2. Fuimos al dae. Yo debía ver al "tío zam", quien no estaba. Pasamos a ver a Viviana. En algún punto, yo como que no tenía mucho de qué hablar con ella (sólo quería preguntarle por Zam y por la casa de Camacho (no sabía cómo llegar)), pero por cortesía pues platicamos un rato, ella tuvo la misma cortesía. En cuanto pudo, nos bateó. Perfectísimo, salí con mi croquis para la casa de Camacho, que por cierto no usé en ese momento. Zamir no tardaría en llegar. Fuimos a los salones en lo que pasaba un rato. Tiré de cabeza a la banda. Nos encontramos a Zam cuando ya pretendíamos irnos. "Ven mañana como a las 10". Perfecto, todo marchaba en orden. A la salida, Olivia nos dio el ride a Fortín.

Fuimos a casa del Camacho. Habíamos quedado de comer en La Balsa con Manolo alrededor de las 1430. Me bañé. Nos fuimos. Llegamos. Comimos como dioses que comen en cantinas.

Llamé a Barojas. Fuimos a Orizaba. Anduvimos con él un rato. Un café, la plática, a Córdoba, luego no hay camión. Me fui caminando desde el parque a la casa de Camacho. Luis fue a su casa. En la caminata vi la taquería con que cenaba (en alguna temporada) cada martes. No tenía hambre, pero quería unos tacos de aquellos. Busqué con quien cenar. La mejor compañía. Na. Como no tenía hambre, pues pensé en ya irme a dormir, pero pensé "igual y ya llegó 'el Duro'". Un tipazo. Ya estaba en Córdoba. Me dijo que sí, que a las 1010 o algo así. Todavía era temprano. Decidí ir a casa de Camacho a esperar. A la hora adecuada, salí, pero regresé porque me dieron ganas de pasar al baño (y debía caminar un rato, y estaba fresca la noche). Salí y decidí tomar otra ruta de salida de la casa del Camacho.

Un poco como de RPG: Viviana me dio un croquis para llegar a casa de Camacho. No lo usé, como que de hecho me fue medio inútil en algún momento. Sin embargo, fue como que el destino sabía que me perdería, o quizá Viviana (así como esos monitos con los que hay que hablar y dan items). El croquis me fue útil porque llegué al punto de referencia que ella me había dicho.

Llegué a la taquería. Llegó el Duro. Comimos. Cada quien un pingüino. Tenía mucho de no comer uno. No había cebollines, quizá le quitó un poco ese "algo" que tenían esos tacos, pero igual fueron excelentes. La idea era ir al billar a la Divina después de eso, con Irazema, Oswaldo y la novia de Oswaldo. Resultó que mejor los alcanzamos en otra taquería. Tenían hambre e Irazema debía despertarse temprano. Estuvimos en la taquería. Todo en orden. No nos fuimos tan temprano. Creo que nos fuimos a las 2. Llegué a casa del Camacho. Dormí. La pasé bien.

(el partido de Francia-Holanda lo medio vi en la Balsa)

Sábado y el Zamirazo

En la mañana desperté y el Zam me dijo "mejor ven más tarde, como a las 2" "mmmmm, ni pedo, ¿te parece que llegue a las 240?" "sí". Confié, un poco a sabiendas que algo raro habría, pero dije "nah, ha pasado un año, ya sólo voy a ir y me los dará." Llegué tardezón, pero llegué. Jugaba España y vi el partido. Llegué y me dijo Zamir: "bueno, vamos a Orizaba" "¿qué?" "sí, allá está Lalo" "aaaah". Un poco trabado, tuve que ceder, qué más quedaba. Fuimos. Lalo estaba ocupadón. "Vamos a comer y luego venimos, ¿te parece Lalo?" "Yo iba para entonces ya emputado con el Zam. No me sorprendía, pero no dejaba de ser molesto." El departamento invitó la comida. Una hamburguesa en McDonald's. No se me hizo mala. Tenía años de no comer una (como 3 años: la última vez me sentí ofendido por la cantidad ridículamente pequeña de carne que tenía mi hamburguesa). Un pie, un café y regresamos. Lalo quemó los discos. Salimos de Orizaba como a las 6 ó 7. Ya para entonces andaba resignado: no iría a comprar nada ese día. Llegamos a Córdoba. Llegué a la terminal. Compré un pasaje al Puerto para las 2020. Eran las 2010. Tuve la intención de comprarlo para más tarde, pero nah, eso no jala: apuestas al sol o al águila, no a una tercera opción que no jale. Además, mi hermano ya estaba en el Puerto y ya empezaba a aburrirse. Subí al adeó.

Desalmado
Estando en Córdoba-Fortín, una amiga, en algún punto, hizo esa referencia que luego la gente hace, de algún modo opinan que soy un desalmado. Es chistoso.

Nostalgia
Córdoba-Fortín, me despertó mucha nostalgia. En Fortín la sentí pesada, en la caminata desde el parque hasta la casa de Camacho. Quizá, de hecho, no me bajé en el parque sino un poco antes, pues caminé cerca de los tacos y ahí fue cuando más la sentí. Se llenaron las jarras. Igual cuando la amiga tocó el tema del coro. Nostalgia. Mucha.

Los que No Vi
No me faltó mucha gente por ver, aunque dos días es extremadamente poco. Lamento, sobre todo, a tres:
(quien)
-Se pandeó el jueves y el viernes se chocó (bueno, lo chocaron estando estacionado, creo). Ni pedo. Cosas que pasan.
-Se decidió izar su mandil a toda asta porque "le prometí que iba a ahorrar y por eso no iré este fin de semana".
-Simplemente no apareció.

De Vuelta al Puerto


Llegando en la noche mi papá pidió una pizza. Cenamos. Yo no tenía hambre, comí tarde la hamburguesa, pero bueno, le entré un poco.

El domingo en la mañana salimos a desayunar. Tacos de birria. Buenos. De ahí me fui con Paco a plaza américas a comprar algo de regalo, en lo que mi papá y Ángeles fueron a misa. "A las 3 hay que estar en el terreno". Ilusos: llegamos a las tres y cachito. Confiamos en que quizá sí porque irían los Dones. Esperamos. La banda llegó como a las 1600. Comimos carne asada. Buenísima.

Ese día me iba. Me despedí. Partí para Villahermosa. Paco se fue a Xalapa apenas antes que yo. Ahora sí. Quién sabe hasta cuándo. Probablemente en navidad.

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martes, julio 15, 2008

El Día más Largo

Hoy dejaré de lado la narración de mis vacaciones. Es apenas la tercera semana en mi trabajo, pero hoy ha sido el día más largo de todos. La razón fue que me desperté con un dolor estomacal feo y una diarrea mediana-baja. Fui a trabajar. Como llegué tarde, decidí que no intentaría ver a un médico sino hasta después de la hora de la comida, y que no comería, para salir una hora más temprano. Así le hice. Además, no me dio hambre. El tiempo se me pasó le-e-e-e-ento. Antes de la hora de comida, mi líder de equipo me encomendó unas cosas. Cuando fue a mi lugar un par de veces, yo sólo lo oía. Sentía que cada palabra podía decirla más rápido.

Después de la hora de la comida, la chica de rh no estaba disponible para que le preguntara qué procedía. Finalmente lo estuvo, como a las 5 de la tarde. En ese momento la abordé y me comentó que podía irme y reponer la hora luego. Decidí quedarme: faltaba una hora para irme. Una hora larguísima. El viaje en camión, de ida al trabajo, igual fue más largo que de costumbre.

Finalmente, me fui. Quise sacar dinero de mi tarjeta de nómina y ¡oh!, el número confidencial era incorrecto. Saqué de otro banco. Tomé un taxi. El tráfico estaba terrible. Tardamos bastante en llegar (tomando en cuenta que la clínica está cerca). En la clínica, había un Dr. Jorge Campos: dudo infinitamente que sea el Brody. Me atendió un Hugo Alvarado, bonachón el hombre. Hasta chistoso se me hizo. Por el sgmm, la consulta fue bara bara bara (tres baras, ¡imaginad!). Me dio una receta. Salí "corriendo" y tomé otro taxi. Otra eternidad para llegar a mi casa. Tráfico horrible. Llegué, dejé algo que traía, tiré la hueva un rato y me fui a walmart.

El médico dejó de parecerme tan chistoso cuando pedí en walmart la pastilla que me recetó y no había. Ya no hice la nueva despensa (había hecho depensa el fin de semana, pero me dio una dieta el vato) ahí. Como ya era tardezón, se me hizo temerario cruzar el puente peatonal hacia una zona que se ve medio ruda para tomar el camión. Otro taxi. Llegué a Soriana. En Soriana tampoco había la madre esa que me dijo el médico (que probablemente sería cara como un airbus). Había el mismo medicamento pero en otras dos presentaciones y pues mejor no le jugué. Terminé comprando Bactrim (en una ocasión en que estaba por mucho más jodido que hoy, me recetaron bactrim y jaló bien), era eso o ir a una farmacia, y realmente estaba bastante castrado como para ir a una.

Llegué a mi casa a las diez y pelo. Cociné una pechuga sin mantequilla ni sal. Eso comeré mañana. Igual y le pongo sal en el trabajo. Debo cocinar gelatina y hervir manzanas y peras.

Un amigo me bromeaba con: "Lo que pasa es que se quiere ir.", "neeeel, no 'me ames' si me hubiera querido ir, me hubiera ido cuando llegué, no ahorita." Sí estaba (estoy) amolado(ísimo, incluso tenía náuseas de repente), pero ps no se me hizo bien eso de irme.

Aún no acaba el día.
(esto fue el martes 15)

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viernes, julio 11, 2008

Te Graduaste. ¿Y luego? o Vacaciones: el Defe

Originalmente, la idea era que después de la graduación me fuera a Villahermosa. Sin embargo, rsultó que de repente mi mamá avisó que una tía suya cumplía 60. Sí, SESENTA años de monja en el Defe y que estábamos invitados al festejo. Debo decir que no me entusiasmó en absoluto, pero bueno, mi mamá "quería que fuéramos". Entonces, me propuso que bien podía yo quedarme una semana más (¡UNA SEMANA MÁS!) en Monterrey haciendo nada. El festejo era el 7 de junio: domingo, y pues ellos se habían ido el lunes 2. Yo estaría hasta el sábado 6 y de ahí volaría (era la propuesta). Viendo que sería horrible estar ese tiempo acá, y que hacerlo desembocaría en que sintiera que tiraba esa semana al hoyo, decidí que me iría antes al Defe. Llegar unos dos o tres días antes del festejo y pasear. En cuando mi mamá confirmó la fecha y todo eso, le pregunté a Kart si podría quedarme con él (tres días).

La respuesta: Supongo que son 4,5 y 6 de junio, voy a decirle a Sandra, no creo que tenga problema alguno, tiene un cuarto desocupado, en casa de mi jefe no hay donde y ese wuey es bien culero, hay que ponernos de acuerdo con Luis para ir a comer o algo ahora que estés aquí.

De ahí siguieron otros trece mensajes en la conversación sobre dónde me convenía llegar y si debía irme en camión o en Avión (catorce porque parece como que siempre tiene el correo abierto, entonces al escribirle es como tener una conversación en tiempo real. Asumo que usará Thunderbird o algo así, claro que los primeros dos fueron correos, otros fueron respuestas de una o dos líneas).

Destaco la pregunta del camión y el avión, en algún punto le dije que también consideraba el camión porque "ps me iba a costar como 300 varos menos y 10 horas es poco, realmente". La respuesta fue: "Ya se te pego lo regio durísimo, a fin de cuentas paga tu jefa, no seas codo." Lo consideré y me fui en avión.

El 2 realmente no hice nada. Creo que hice la maleta y ya. El 3 viajé.

En el Defe Antes del Festejo

El día del viaje y el día 1:
Llegué el día 3 de junio al Defe en la noche. Tomé el camioncito que va del aeropuerto a Santa Fe. Le avisé al buen Kart y cuando llegué ahí estaba ya esperando. Amablemente había llevado una chamarra de sobra el muchacho. Yo iba con mi suéter, así que no la usé. Llegamos al departamento de Sandra. Al entrar, noté en la cocina una especie de tacos de surimi o pepino que no recuerdo, pero creo que pensé que los usarían para desayunar. Sandra dormía. Sandra se despertó. Nos sentamos a cenar y entonces descubrí que los tacos de pepino y surimi serían la cena. No estaban mal, pero realmente no se me antojaron, se me antojaban unos tacos al pastor, pues acá la carne al pastor sabe diferente y los limones no tienen jugo. Cené mis tacos de pepino y surimi con salsa de soya. Dormí. Me asignaron el cuarto vacío y todo :D. Sandra me explicó dónde estaban las toallas y esas cosas irrelevantes.

Al día siguiente, desperté como a las 11. Estaba solo, pues ellos trabajan. Creo que le mandé un mensaje a una amiga chilanga y a un amigo chilango. Ella no contestó, el otro contestó como un día después o dos. Bajé el mapita de las líneas del metro y lo imprimí. Averigüé los horarios de Bellas Artes y algunos museos. Me bañé y me fui. Ya era hora de comer cuando me fui, eran como las 14, de modo que decidí que comería en la primera fonda que viera. Tomé el camión. Me pasé de donde iba. Me bajé en cuanto pude. Vi un conjunto de restaurantes de comida corrida. Comí. pregunté por el camión que me llevaría a Barranca del muerto o Mixcoac: Mixcoac estaba 3 cuadras (grandes) atrás. Caminé. Entré a la estación del metro. Compré 7 boletos. Subí al metro. Bajé en Tacubaya. Cambié a la línea rosa. Bajé en Salto del Agua. Cambié a la línea ¿verdeazul? Bajé en Bellas Artes. Para cuando entré al Palacio de Bellas artes eran las 4. Cierran a las 6.

Cuando veía el primer mural, noté que había un grupo de gente a la que un viejito les explicaba. Decidí pegármeles. Oí largas explicaciones de casi todas las pinturas, hasta que noté que si seguía en el grupo, no acabaría de verlas a detalle. Como a las 530 dejé al grupo y sólo leí las fichas de las dos que me faltaban. Debo mencionar que el grupo este era como de aspirantes a guías. Había una señora que se quejaba de que el viejito no les decía el "tema principal" de la obra. Lo más curioso, es que era lo primero que el viejito decía, y de ahí empezaba a dar detalles. En cualquier caso, viendo la ficha y viendo las imágenes, creo que se podía deducir el fin de la pintura o interpretarse de algún modo. Para este caso, no cabría el "es arte, no necesariamente tiene un significado": era arte narrativa.

De arte decorativa creo que sólo había una pintura, una de un ángel. Me pareció un poco sin chiste. Quizá suene raro, pero creo que la pintura que más fuerte me pareció fue la "Alegoría a Cuauhtémoc": realmente no hay muchas imágenes, o detalles de volumen, pero los ojos del Cuauhtémoc en la segunda parte, me parecieron decir mucho.

Salí de Bellas Artes y me fui con los Karts. Se suponía que iríamos a un "Bar de Chocolate" del que me habló mi hermano (es de la novia de un amigo o conocido suyo). Está medio caro, pero el chocolate es muy bueno. Kart pagó :D Se lució el vato. Claro, yo tenía la intención de pagar lo mío. La conversación fue como:

R-Que paguen los asalariados. JA.
Llegó la cuenta
R-Era broma. Toma mi parte.
K-Yo pago, no hay pedo.
R-¡Cómo crees! No, no, bla bla bla
K-Yo pago bla bla bla
R-Bueno.

Regresamos. Ese día jugó México y perdió. Vi creo que dos goles y el de México.

Día 2: Cuando me iba a dormir el día anterior, pensé "mañana voy a Chapultepec", yo creo que mañana le hablaré a amigachilanga para que me acompañe. Me desperté tarde y en lo que perdí el tiempo, noté que ya no era razonable ir, pues cierran tempranón. "Mañana iré, el día que vaya le hablaré a amigachilanga". Kart me había dicho que "debía ir a conocer la estación de La Raza", entonces, como ya era tardezón, decidí ir allá y a Tlatelolco. Ciertamente la estación está chida, pero debí ir antes a Tlatelolco, pues ya no me dio tiempo de ver el Memorial, aunque no me llamaba tanto la atención. Vi toda la estación de la Raza, la zona arqueológica, la plaza y la iglesia. El rumbo de Tlatelolco es feo, se ve rudón. Regresé al departamento de Sandra. Llegué como a las 830. En general la intención era llegar tempranón al departamento de Sandra. Ese día sí fuimos por tacos de verdad. Quedamos de ir al día siguiente al cine. Ya habían comprado los boletos para "Sex and the City". Realmente no me emocionaba verla, pero ps estaba invitado y todo, además que así vería la plaza de Santa Fe. La idea era que llegara yo a las 3 de la tarde al hogar para irnos a comer. Supuse que no iría a Chapultepec.

Día 3: Aunque me desperté temprano, noté que de hecho no me daba tiempo de mucho, por aquello de que comeríamos en la plaza. Lo único que hice fue comprar mi pasaje para el Puerto y caminar por cerca del Ticketbus donde lo compré.

Llegué a las 230-240. Kart no tardó en Llegar. Sandra tardó en llegar. Nos fuimos. Comimos en la plaza. Fuimos al cine. Vimos la película. Notamos que sólo había mujeres y acarreados en primer grado en el cine (acarreados = varones a quienes sus novias/esposas/amantes/concubinas llevan) y yo. Creo que era el único acarreado en segundo grado. "Esto te haría un ganso" (o algo así me dijo Kart.

La película, aunque jamás vi la serie, siento que era como un conjunto de varios capítulos de la serie pegados y sin comerciales. Igual me entretuve, claro que es una película que igual no importaba que no hubiera visto. Las personas del cine estaban emocionadas: gritaban y aplaudían. Fue medio raro.

Saliendo del cine, fuimos a comprar mis tamales dulces, aquellos con los que los jodí desde que llegué. Dije que no quería comer tamales de la calle, unos de una fondita estarían bien. Me llevaron a una fondita fresa donde cada tamal valía 14 varos. Pedí uno de chocolate (Sandra amablemente pidió 3 y no cedió uno para que yo me comiera dos), uno creo que de elote y dos de dulce. En algún momento, yo noté que sandra había pedido como seis u ocho tamales, ella lo notó cuando le dieron la cuenta. Fue chistoso. Llovía a cántaros.

Llegamos al estacionamiento del edificio y Kart bajó rápida y ágilmente para no mojarse, aunque ya no llovía muy fuerte. Sandra no bajaba, y yo iba atrás, cuando sentí que había tardado, le dije algo como "mmm la puerta no se va a abrir sola (carro de dos puertas, yo la estaba esperando)... aaaaah, estabas esperando que el vato te abriera" "Sí :(" Me empecé a reir. Se bajó. Me bajé. Llegamos a la puerta.

(Rodrigo no deja de reírse)
K-¿Qué pasó?
S-... (lo mira con desprecio (creo que de broma))
(Kart abre la puerta del edificio y suben todos)
K-¿Estás molesta?
S-Sí, estoy enojada.
K-(extrañado)¿Por qué?, ¿tiene que ver con lo que está haciendo que se ría este pendejo?
S-Pregúntale a Hoil.
(Rodrigo Explica la situación sin dejar de reírse)
(Kart se empieza a reir sin parar y sandra se mete medio molesta al departamento, y cierra)
(ambos se quedan afuera riéndose)

Después ya se contentó Sandra, creo que estaba jugando. No creo que realmente se haya enojado. Esa mujer es como la Paz.

Cenamos nuestros tamales (yo sólo comí dos de mis cuatro), me puse a averiguar cómo llegar a casa de mi tía, le mostré a Kart y cada quien se fue a su cuarto. Nos dormimos.

Día 4, el Día del Festejo: Al día siguiente me desperté temprano, me bañé y me vestí como persona decente para ir al evento de mi tía.

S-Hasta que te vistes como gente decente.
R-Aaaaaaaaah, qué exagerada. Me visto normal siempre, pues, ¿qué en tu escuela nadie se viste normal con playera?
S-Sí, los isc. Ja.
R-Ja.

Me despedí de Sandra y Kart me dio el ride. Llegamos rápido y sin problemas. Mi mamá me dijo que era en un portón café.
1. Había un montón de portones de diferentes tonos de café.
2. El portón era negro.
Aún así llegamos sin problemas, pues teníamos el número correcto.

Me abrieron la puerta, entramos, saludé a mis familiares, Kart saludó y nos despedimos. La idea era acompañarlo a la puerta, pero el vato se fue corriendo, como cuando una fiesta en "la casita" de Yair. Bueno, un poco menos sorpresivamente.

Mi mamá tuvo la ocurrencia de encargarme tomar fotos. En el festejo de las viejitas anduve tomando fotos, a lo largo de la misa. Después del festejo nos dieron comida. Después de la comida creo que nos fuimos a un tianguis que estaba ahí cerca y a un parquecito que también estaba por el rumbo.

Del parquecito destaco a un viejito que es fotógrafo. Realmente yo no le presté mucha atención originalmente, pues asumí que las fotos eran tomadas por un ajeno, además que hasta el frente estaban las que suelen haber siempre: pies de indígenas y cosas similares. Paco, un poco más detallista, se acercó a ver las fotos. Había unas muy padres, realmente, y les daba un extra el hecho de que él fuera el fotógrafo. Un viejito sentado en su silla plegable vendiendo fotos en una alameda, fumando un puro. Recuerdo que se llamaba Enrique, pero no recuerdo sus apellidos. Creo que el primero era Rodríguez o algo similar. Anduvo platicándonos unas cosas. Finalmente nos fuimos. Regresamos a la casa, creo que dormí un rato. Luego cenamos. Luego, tras hablar un rato con la banda, cada quien se fue a su cuarto. Platiqué con mi hermano. Nos dormimos.

Día 5: Decidí irme con Paco de paseo. Despertamos, nos bañamos, bajamos a desayunar, platicamos un rato con la banda y nos fuimos con mi tío/conocido, pues él se iba de vuelta a Tijuana, pero antes se iba a ir a pasear (muchacho raro: si yo llevara 5 años de no ver a mis hermanos (aunque sólo estuvieran dos y fuéramos siete), quizá buscaría convivir con ellos, sí, muchacho raro. El tipo es buena gente, pero eso me parece rarón. El taxi nos dejó en un Gandhi, donde Paquito había pedido un libro y tuvo algún problema con él. Como era domingo, el área de internet estaba cerrada y mi hermano tuvo que pelársela. En sí, el problema fue que el hombre de estafeta no encontró el domicilio y regresaron el paquete sin decirle nada, en lugar de pedirle que fuera por él. Le escribí un mensaje a mi tía para ver si me daba el número de mis primos. No contestó. Me enteré que por el momento no usa ese número sino otro. En vista de que no contestaron, nos fuimos a C.U. yo no conocía ahí. Está bonito, aunque había algunas cosas cerradas. Nos sentamos un rato en los jardines que están entre la Rectoría y la Biblioteca, pasamos a la biblioteca, caminamos por un punto donde hay esculturas, caminamos hacia otro lado donde asumimos que pasaría el pumabús. El pumabús no pasaba, entonces seguimos caminando hasta que llegamos a una caseta de vigilancia. Preguntamos por un lugar para comer y salimos de C.U. creo que subimos al metro y nos fuimos a Coyoacán. La idea era ir a Coyoacán después de comer (comimos en Plaza Coyoacán, que curiosamente está todavía en la otra delegación, creo). Cuando acabamos de comer, notamos que lo mejor era regresar. Regresamos y nos pusimos a platicar con la banda.

Corazonadas

Ese día nos íbamos de ahí Paco y yo. Teníamos la intención de salir con una hora y media de anticipación. La amiga de mi tía, parlanchina como un loro, dijo que lo mejor era pedirlo con tres. A mí me pareció una exageración. A Paco también. Al final no nos dimos cuenta cuando lo pidió. Llegamos como en veinte minutos a la TAPO y estuvimos esperando nuestros respectivos adeós por dos horas y media. Cuando dio la hora, nos despedimos. Fue emotivo, pues en ese momento no sabíamos que nos veríamos la semana siguiente, no sabía cuándo lo vería de nuevo, así como ahorita, sólo que ahora es un hecho que con suerte será en diciembre, pero no es seguro.

Creo que debimos hacer caso de nuestras corazonadas. Siento que es un caso similar a cuando llegué a Monterrey la primera vez y le hice caso al nerviosismo de mi papá antes que a mis corazonadas... y esperé tres horas en la terminal de Tampico.

Anónimo

En una entrada anterior, comentó un(a) anónimo(a) (asumiría que es mujer). Le pregunté a la anónima que comentó la otra vez y me dijo que no fue ella. No le creí mucho, pues tienen un modo similar de escribir y dicen cosas medio similares. Probablemente le pregunte de nuevo. Si acaso es cierto que no es la misma, la respuesta es:
-Mmmm en algún punto me has de medio conocer, como para que te recuerde personajes de una serie, así que velo por el lado bueno: vas por menos ;). Si dieras tu identidad, podríamos ver cómo le hacemos.

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martes, julio 08, 2008

Adorno Cilíndrico de Aire

Pues no sé qué opine la gente, pero suponiendo que hay un universo casi infinito de posiciones que pueden adoptar esas madres que tienen un ventilador abajo y son como cilindros que reciben aire y adornan, que ponen en las plazas y comercios; que teóricamente, por el aire, tienen la tendencia de mantenerse rectos y apuntando hacia arriba, con breves variaciones; que es raro que pase junto a una de ellas; que es poco probable que una ráfaga coloque el adorno en una posición lo suficientemente baja al mismo tiempo que pasa una persona; y que el día viernes 30 de mayo (el día que fui a Sears con la banda, a ver a mi tía) no había tanto aire como para bajar una de esas de su posición, siento que es una cuestión de suerte que una de esas cosas haya tenido la gracia de bajarse y golpear mi cara con la suficiente fuerza como para quitarme los lentes y aventarlos 10 ó 20 metros hacia atrás.

Toda una experiencia que no le pasa a cualquiera.

Realmente yo ya daba por perdidos mis lentes. Mi hermana los encontró bastante atrás de donde estábamos.

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Que me Voy Graduando

Pues así fue. Me desperté el viernes 30 de mayo pensando dos cosas:
1. "Qué hueva, es muy temprano."
2. "Hoy me dan mi título."

Tuve que despertarme muy temprano para atender al desayuno, que era, creo, a las 8. Despertador a las 630 y 645. Me bañé, me vestí. Traje, corbata gris (gris oscuro), que por cierto, había comprado el día anterior, justo antes de ir al hotel a ver a mi papá y compañía. Todo un culo, pues. Llegué a tiempo al desayuno. Me dieron un ticket, con el que entraría al gimnasio y, creo, serviría para saber que sí había llegado.

El Desayuno

Nos sirvieron machaca con huevo, frijoles y chilaquiles. Pan dulce y fruta al centro, café y jugo de toronja o zanahoria. La Directora de Carrera, siempre al pendiente de nosotros, sus hijos putativos, nos envió con anticipación un correo en el que nos recomendaba no tomar mucho jugo ni café y llegar con calcetas del color del pantalón, "para no hacer el oso". Pues yo medio abusé del jugo y tomé dos tazas de café. A la hora de las entregas, fui al baño como 4 veces (antes que nos tocara). En la mesa estábamos Arturo, Mario Palomera, Emmanuel, creo que Sofir, creo que Daniel Conant, Paulina Galindo, Marcos ¿Torres?, quizá alguien(es) más y yo.

El desayuno estuvo agradable. Saliendo del desayuno, nos llevaron al gimnasio, como borreguitos tras su pastor. baaaaa.

La Entrega

Creo que en el desayuno repartí los silbatos que llevé. Los usé cada vez que pasó alguien que conocía o medio conocía. Al final no hace diferencia para el que recibe su título: no lo nota. Me tocó junto a Arturo, a mi izquierda estaba el baño. Cuando empezaba la ceremonia, notamos que un cuate no había llegado aún. Supusimos que el desayuno le valió queso, pero la entrega es otra cosa. Arturo lo llamó.

Empezó a tocar la banda, habló el orador huésped con su discurso feo (yo esperaba que hubiera sido otro orador), habló el rector con un discurso coloquialón (como que sólo tiene las ideas anotadas y las dice, pues recuerdo que no fue idéntico al del día anterior), no me llegó. Asumo que hasta que vaya a otra entrega de papeles de letras oiré un discurso que me llegará.

Empezaron a pasar los de otras carreras. Finalmente nos tocó a nosotros. En ese punto me puse nervioso. Cuando nos formaron para pasar al frente, noté más mis nervios: al pararme, quise abrocharme el saco y me lo abroché mal, las manos me temblaban un poco y pues me costó trabajo abrochármelo bien.

Finalmente pasé yo. A uno se le olvidan las cosas. Gustosamente me saludó el viejito que me dio mi título y también gustosamente lo hizo el rector. Bajé y mi hermano y mi papá me tomaron fotos con el título. Rumbo a mi lugar, de hecho cuando iba bajando del escenario, sentí que se fue la presión. Regresé a mi lugar nervioso, con una sonrizota y la mano tapándola. Los ojos abiertos, muy abiertos. Se acabó.

Siguió pasando la banda. Acabó y nos felicitamos todos. Esperé a que saliera un poco la banda y me fui con mi familia. Llegó Adrianita y se tomó una foto con Emmanuel y conmigo. Pasé a la casa a quitarme el saco y la corbata. Después nos fuimos a un restaurante que me recomendó Adrianita el día anterior. Tragué como náufrago, culpa del platillo. De esas comidas con toda la familia.

Fin de Semana Familiar

Situación curiosona, cuando las graduaciones de mis hermanos, sólo habían sido comidas familiares. Ahora fue todo el fin de semana. Me la pasé bien.

Saliendo de la comida, fuimos a ver a mi tía Virginia a SEARS, lejos, lejos. Fuimos a su casa y anduvimos ahí un ratote. Finalmente regresamos. Yo me fui a mi casa, mi papá y Ángeles al hotel, mi mamá y mi hermana a las residencias. Emmanuel me había invitado a la graduación, pero como que no me dieron muchas ganas de ir. Era leeeeeeeeeeeejos.

Al día siguiente, el sábado, fuimos a la macroplaza, al paseo santa lucía y al parque fundidora. Había un sol de la remadre. Mi hermana se asoleó bastante, se quemó un poco. En la noche fui con mis hermanos y Daniel y Ernesto al Café Iguana. Estuvimos poco rato ahí. Nos fuimos al "Salón Morelos". Cuando llegamos, yo me dormí un rato. Después de eso nos fuimos a una fiesta de la que me había dicho Emmanuel y casualmente Daniel también estaba enterado. Estuvimos poco rato, estuvo simpático también.

El domingo fuimos a comer a casa de mi prima Adriana a Apodaca. Lejos, lejos. Comimos chido. Conocí a unos hijos de mis primos que prácticamente no conocía y conocí a mi sobrino Miguel (lo conocí cuando él era muy chico). Me cayó bien. Me la pasé bien con mis familiares, hasta ganas de volver me dieron. Mi papá se fue el domingo. Mi hermana el lunes en la mañana. Me desperté temprano para acompañarla a tomar un taxi.

El lunes fui con mi hermano y mi mamá a Valle Oriente. Comí una dona. Fuimos a la Alameda a que Paco comprara machaca y glorias para sus amigos y mi mamá comprara glorias para su banda. Después debíamos comer. Se me ocurrió ir a Interplaza. El error fue que nos fuimos por el mercado y pues no es una parte bonita, sí vimos a dos borrachos tirados. Tenía la intención de llevar a mi mamá a que conociera la iglesia del Roble (o algo así), pero por alguna razón, la iglesia esta cierra los lunes. En la noche se fueron Paco y mi mamá.

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lunes, julio 07, 2008

Casi Graduado

Para no desatar nuevamente la ira del que puedo llamar "fan #1" (mi hermano no tiene mucho tiempo libre como lo tiene el fan #1), anotaré los detalles de mi graduación.

Lo que Aconteció tras el 25 de Mayo

El 26, lunes, festejé mi cumpleaños. Le avisé a quien vi en internet ese día como a las 2 de la tarde, a quienes vi en vivo y me acordé, y a una u otra persona que haya recordado por defecto. La pasé bien. Creo que éramos diez u once. Fuimos al Sierra Madre de Garza Sada. Un vato llevaba cupones y no los mencionó, de modo que todos pedimos a lo menso y ya que estábamos comiendo bien a gusto, finalmente avisó. Ni modo.

El 27 fue martes. Creo que ese día (o el miércoles) fue la entrega de reconocimientos de desarrollo estudiantil. Ciertamente no debería ser necesario decirle a la escuela, pero lo es en ocasiones. Yo lo olvidé. Ni modo. No tenía la más remota intención de ir. Me desperté tarde (tarde 11 del día) y me puse a ver "The Hitchhiker's Guide to the Galaxy". Justo faltaban 20 minutos para que acabara (y los mismos 20 para que diera inicio el evento) cuando un amigo me invitó porque le habían sobrado boletos. Después de pensarlo como dos minutos, le contesté el mensaje de texto diciéndole que sí iría. Como ya estaba bañado (me había bañado justo antes de ver la película), sólo tuve que vestirme. Me puse una camisa roja, un saco y un pantalón. Llegué a tiempo. Tardé un poco más de lo esperado porque me puse una corbata y, ya puesta, noté que estaba arrugadísima, entonces tuve que cambiármela. Por la prisa, paradójicamente, tardé en hacerme el nudo en la otra. Finalmente acabé y llegué. Ahí estaban Arturo y Emmanuel. Me quedé afuera esperando a la hermana de Emmanuel, para que le diera los boletos (llegaron tardezón y pues Emmanuel, que recibiría diploma, había tenido que pasar). Le di los boletos y descortésmente, con sólo el "hola", me metí. Ya que lo había hecho, pensé que no había sido lo más correcto, pero ni pedo. Por cierto, para que yo reconociera a su hermana, Emmanuel me dijo "tiene el pelo pintado de rojo". Pésima seña. Al entrar al lobby, vi a unos cuates y me puse a platicar con ellos. Me senté junto a ellos.

Pues fue el evento. Fue bastante chistoso. Después hubo gorra de tamales y tacos. Me fui a mi casa.

Errata

En otra ocasión mencioné que el sábado 24 no había hecho nada, que probablemente había ido al centro a caminar para pasar el tiempo. Es cierto. Fui al centro a caminar, pero igual fui al cine a ver "The Savages". Está curiosona. Tiene, según recuerdo, algunos chistes medio negros, o que quizá no eran chistes, pero a mí me dieron risa. Película de ADO. Por otro lado, cuando salí no me la pasé mal, pero creo que le caí mal a la amiga de una amiga con la que iba, lo que me dejó como más o menos ajeno. En fin, fue como ir solo, pero igual me la pasé bien.

Graduaciones Ajenas

Lo siguiente que hice y vale la pena recordar fue el jueves 29. El día en que entregaron los papeles a la división de ingeniería y ciencias sociales, humanidades y ciencias de la salud. Ahí iba yo muy campante con mi matraca gigantesca. De pantalón, saco y una camisa azul cielo. No usé corbata. Aplaudí y grité con todo a la gente que conocía. Me quitaron la matraca al entrar, por cierto. Al final no hace diferencia echar o no porras. Uno no se da cuenta cuando está por pasar o pasando. Oí el discurso del orador huésped, aburrido. Oí el discurso del Rector, simpático, pero no es llegador; pensé que "mañana quizá sí me llegue, porque seré yo el graduado", aunque era muy probable que me moviera igual, pues el discurso era una plática simpaticona. Acabó el evento y me fui a felicitar al Papi. Me quedé con las ganas de felicitar a la demás gente que conocía, pero al final del día, creo que les da igual. Quizá sí hubiera podido, pues fui con el Papi a su casa, según a comer y pues estuvimos como dos horas sin hacerlo. De cualquier modo, me la pasé bien. Saliendo de la comida, ya tardezón, me fui al centro a comprar silbatos, para hacer ruido en mi graduación. Apenas andaba yo en la tienda de madres para fiesta cuando fui avisado de que mi papá ya había llegado, me recomendaron que me fuera al hotel donde se hospedaría.

Llegué al hotel y esperé una hora. Bien hubiera podido comprar los silbatos con calma y darme una vuelta por el centro en lo que esperaba. No lo hice. Me cabeceé dos o tres veces en el mueble del lobby. Los dependientes habrán opinado que era yo un vago, o similar. Recuerdo que me había cambiado la ropa. Llegaron mi hermano, mi papá y Ángeles. Después de un rato, yo me fui, pues el Papi (y me quedaré con la idea de que me invitó porque le sobraron boletos) me había invitado esa tarde a su fiesta. Me bañé, me vestí y me fui. Saco, camisa amarilla, quizá corbata gris o negra. Estuve hasta la medianoche. La fiesta del Papi estuvo simpática. La pasé bien en el rato que estuve. Igual iba el Orejón.

Me retiré a la medianoche porque a esa hora me convierto en calabaza. Eso y que mi mamá llegaría. Fui a buscarla a ella y a mi hermana y las acompañé a las residencias donde se hospedarían.

-Te vas con cuidado, hijito. Pide un taxi, no vaya a ser peligroso.

Fue la recomendación de mi mamá. Yo le dije que no había problema, que varias veces había hecho esa ruta a esa hora (o más tarde). Llegué a mi casa. Paco aún no llegaba (había salido con Neto). No puedo negar que me haya preocupado. Yo llegué alrededor de la 1, y de él no sabía nada, creo que le mandé un mensaje. La última vez que Paco había desaparecido, había pasado algo raro. Me quitó el sueño y no dormí. No es cierto. Confié en que no pasaría nada malo y dormí como piedra hasta la hora en que el despertador empezó a tocar sin piedad una tonada de Chopin.

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