Mi vida errante

cha cháaaan

martes, octubre 31, 2006

Argentinos...

“La Volpe se tiene que adaptar a los jugadores”, afirmó el lateral Hugo Ibarra.
“Todos (los jugadores) no somos iguales y algunos tienen un temperamento distinto al suyo, además de ver el fútbol de otra manera. Por eso es más sencillo que él se adapte al grupo y no al contrario”, dijo el lateral Ibarra a la cadena de televisión ESPN.

sábado, octubre 28, 2006

El Viajero

Viaje a Veracruz

Pues se cumplió el viaje a Veracruz. Cantamos como a las 1130. Yo siento que canté de la rechingadísima, pero ni modo. Estaba nervioso. La pierna me temblaba de manera increíble e incontrolable. Pese al ridículo, el viaje fue bueno. Me invitaron a desayunar en un buffette del hotel bello (desayuné soufflé, chilaquiles, plátanos fritos, sandía, yoghurt, un cacho de toronja y una uva) y a comer en Carl's Jr. La gente es simpática, por ese lado también todo estuvo bien. Habría que reprochar a los organizadores del evento (Verde Reflex) que se pasaron de lanzas al decirnos que pasaríamos de nuevo después de una hora y luego decirnos que no. Así es, esperé una hora y media para que nos dijeran "Ah, ya no". Cantamos color esperanza y es por ti entre todos, las chicas cantaron también Don't Speak y Algo más.

Dormí gran parte del camino de ida y creo que todo el de vuelta. Falté a una clase, pero el profe me dijo que no habría problema. Llegué a redes 3 a las 1730. Sí, justo llegando fui corriendo al salón. Diez minutos después comenzó la clase. Creo que después de la clase fui al gimnasio.

Corté una flor más del jardín de difusión cultural y una del departamento de promoción :).

Viaje a Puebla

Ayer viernes me encontraba yo tranquilamente sentado en mi clase de bases de datos avanzadas y, repentinamente, alguien le comentó a kart de un viaje a Puebla a ver una conferencia de un cabezón de Stanford. Quedaban 3 lugares. Yo salté a pedir uno (de cualquier manera no tenía nada que hacer ni tengo más responsabilidades que mis tareas). La cita era a las 1530. Ahí estuve. Salimos a las 17 y la conferencia era a las 18. Obviamente no llegamos. Llegamos a la sección de preguntas :| . A mí la neta me daba pena entrar. Vi a Manuel Muradás en la conferencia. No me explico por qué hay gente que pregunta pendejadas en las conferencias. Como que preguntan sólo por hacerlo.

Salimos de ahí a las 1945. Fuimos a cenar tacos árabes. Otra flor del jardín del Centro Colonial Veracruz. Regresamos. La niebla estaba espesa, pero no nos atrasó mucho. De ida habíamos tardado hora y media, de regreso hicimos 2. Llegamos a la escuela a las 2330. El Peludito me llevó a mi casa.

Dormí.

Quiniela

Recordando otro artículo, mencionaba que el 29 los globos del cumpleaños de mi vecino seguirían en la casa y que sólo desaparecerían cuando estuvieran desinflados. En otra plática calculé dos semanas para que se fueran (o fueran quitados). Dependerá del calor como decía mi interlocutor. Ahí siguen y dudo que mañana 29 ya no estén. Dudo que el jueves hayan desaparecido los globos y las servilletas de los muros. La manta ya se cayó.

Haga sus apuestas, tome en cuenta que llevan diez días de inflados (aparecieron el 19 de octubre). Yo mantendré las 2 semanas, que se cumplen este jueves, aunque dudo atinarle, más bien aseguro que el jueves seguirán ahí.

viernes, octubre 27, 2006

Los que NO Se Publicaron

Ha habido dos artículos que no publiqué o no he publicado. El primero fue el de mi punto de vista en el mundial. El problema con ése era que todo cambiaba. Al final tendría que modificar mucho de lo que ya está y agregar todo lo que sucedió después.

El otro era algo así como los requisitos para una pareja. Fue un documento que se me ocurrió hace como dos meses. Está chistosón. Era más o menos real. Había demasiados puntos y creo que igual y algunos eran exagerados. Éso lo hacía simpático. A ver si un día lo publico. Como que no lo hago porque se asumiría cierta desesperación y no, lo hice por ocio puro, una más de las boberías que se me ocurren constantemente.

miércoles, octubre 25, 2006

Presunto Viaje

En teoría, mañana vamos a cantar a un evento de captación al Puerto. Todo iba bien. Éramos cuatro varones y como 7 mujeres. Sin embargo, por diferentes razones, los otros tres varones tuvieron que abrirse y sólo quedé yo. Eso será raro y complicado, sí, por un lado quizá jamás vuelva a ver a la banda que llegará al evento de mañana. Sin embargo, cantar como solista una parte que iba a ser coral es complicado. Si acaso me equivocara en coro, no pasa nada, no se nota tanto como si me equivoco siendo solista.

A ver qué pasa. Participaré en "Color Esperanza", "Es por ti" y "Regresa a mí". Ya mañana veremos, primero, si llegué y segundo, si no me equivoqué de manera garrafal.

lunes, octubre 23, 2006

Lunes 23

Hoy es lunes y he vuelto a la realidad mundana, ya fuera de mi mundo de fin de semana. A aguantar el castre de la banda y a tomar el camino de "no pasó nada".

Pozole

Ayer estaba yo pajareando en internet y, en una de esas me puse a chatear con Rubén y éste me invitó a comer a su casa. Acepté sin pensarlo mucho, de comer el pollo frito de aurrera recalentado a comer algo recién hecho y que seguramente estaría rico (y lo estuvo). El punto de encuentro fue la terminal de autobuses, del lado de los AU. Llegó Rubén y partimos rumbo a Potrero. Llegando a Potrero pasamos por Liliana, la novia de Rubén (sí, Rubén tiene novia y, aún más extraño, parece que la quiere desde mi punto de vista) y luego llegamos a casa de Rubén. Cuando yo salí de mi casa había sol y por ello salí bastante primaveral: con short y sin chamarra. Desgraciadamente llovió y, en la noche, me mojé un poco y sentí frío.

Comimos pozole. Estuvo excelente al igual que la gelatina y las tostadas, que también parecían recién hechas.

Luego me dejaron en la parada del autobús y llegué a Córdoba.

Me Mojé

Sí, de la terminal al centro tomé un camión y tuve que caminar un tramo. Había frío y lloviznaba. Me mojé. Eran alrededor de las 19.

Lunes

Regresando al mundo diario, como era de esperarse, la banda cuando puede se pone a joderme, y me da mucha risa. Pero eso no es lo que habría que contar. En lo que va de hoy fui a hacer mi servicio de becas, que consistió hoy en avisar a los profesores que deben llenar una encuesta. La mayoría de ellos lo toman a bien y me agradecen. Pero no falta el profesor ojete (de hecho han sido dos profesoras) que pone su cara. Una fue bastante diplomática e hizo como que me agradecía, pero en la expresión se veía que no le agradó que pasara a decirle. La otra, apellidada Bellato, de plano me vio feo y me dijo de mala gana "dile a Male que el sistema me sacó". Le respondí que yo le diría, con una sonrisa y dando mi mejor cara, pero no entiendo por qué se molesta conmigo, yo no tengo la culpa de que ella sea feita (ja) o de que tenga que llenar una encuesta, o que le tenga que avisar. Yo estoy cumpliendo mi encomienda y ya.

domingo, octubre 22, 2006

El Cumpleaños del de la Sala

Creo que entre las cosas que no he mencionado, y no están anotadas en la publicación de mañana de mi semana pasada, está el hecho de que el vato que vive en la sala cumplió años el 19 de octubre. Admito que cuando llegué y vi globos en forma de corazón y una manta diciendo "te quiero, te adoro, te amo", me sentí confundido. Confundido porque, además de la manta y los globos había servilletas de spiderman pegadas en el muro, al igual que platos del mismo personaje y un pastel de chocolate con una vela en forma del marveliano. Uno no usa figuras de súper héroes a la hora de celebrar meses de relación. Tuve la certeza de que era su cumpleaños cuando vi los letreros de "Feliz cumpleaños". Habría que decir que la novia del vato tiene mala ortografía: escribir feliz con acento en la i sirve como prueba fehaciente.

En fin, entre sus actividades de celebración estuvo la profanación de la recámara del otro vecino. Y bueno, habría que contar los días que pasarán de aquí a que el vato de la sala quite las servilletas y platos de los muros y bote los globos y minicorazones (los minicorazones están en la mesa y no falta ocasión en que yo suba a comer y se me pegue uno en el brazo o tire uno al piso). Me atrevo a decir que los globos se desinflarán y sólo entonces los quitará. Y las servilletas se caerán con el tiempo. Digo, hoy es domingo y no veo ni intenciones de quitar las cosas, ni siquiera el letrero de "Feliz cumpleaños" que ahora yace en el piso y tropiezo casi cada vez que paso. Por cierto, eso fue el jueves 19 de octubre. A ver si para el 29 ya no está, que lo dudo de aquí a Neptuno.

La Parte Buena

Ja! Bienvenido a mi Mundo

Cuando le comenté a un amigo mis aventuras del viernes y mi sentimiento de ser un gandaya, algo cercano a una cruda moral (todo eso lo publicaré mañana) entre las primeras cosas que él me contestó (todo con una breve plática de mensajes sms) figuraba una que me dio risa y tardará en olvidárseme, sí, la que subtitula esta parte del artículo: "Ja! Bienvenido a mi mundo". Me dio bastante, bastante risa.

La Parte Buena

La parte buena se refiere a la parte disfrutable, la que no siente ninguna especie de sentimiento gandaya y que ve las cosas por el lado bueno, digamos que lo que pasó el viernes entra entre las cosas contables como "chistosas". Algunas de las razones son las siguientes.

a) Innegable que ella entra en el top 5 (tiene bonitos ojos, bonitos labios, una sonrizota (sé que es con s, pero la z le da cierto empuje, como que suena como una sonrisa más grande que sonrisota) y bonito cabello y además es chistosa).

b) Innegable que lo disfruté y me gustó el momento.

c) Innegable que es algo que hasta cierto punto complicó mi vida un poco, al menos de manera interna y la hizo, cuando menos por el fin de semana, más retadora.

d) Innegable que es chistoso y una de las cosas que uno puede agregar a su haber de anécdotas para contar y reírse en un futuro (la situación completa).

Tiene los labios suavecitos. :)

jueves, octubre 12, 2006

Festival

La semana pasada todo marchó bien. El lunes entregué mi examen de Lenguajes de Programación, y salí bien; el miércoles hice mi examen de Sistemas Operativos 2 y salí bien. En la clase de canto del miércoles aclaré mis últimas dudas y todo parecía estar bien. El único problema era quizá el trabajo de Redes 3, estábamos algo atrasados pero aún teníamos una semana.

El jueves fue el ensayo ya con sonido de las canciones con que inauguraríamos el festival de las artes de la Rectoría. En los primeros intentos sonó muy feo, pero todo se compuso.

El viernes fue quizá el día más emocionante de la semana. Básicamente porque hubo un olvido y la suerte me sonrió. Todo comenzó con una decisión tomada el jueves. Pues bien, el jueves Viviana Sánchez me dio el ride a la gasolinera y tomé el camión a mi casa. A la mañana siguiente, viernes ya, Rubén no pasó (no se despertó) y para terminar de amolarla, me desperté tarde para mi clase de las 7. Tuve que agarrar un taxi, de modo que llegué a la escuela con 6 pesos, confiando en que en la noche sacaría dinero del banco. Tras la clase de Arquitectura acudí a comprar un pambazo, mi bolsillo tenía únicamente 1 peso ahora. Acudí a Bases de Datos y, después de peinarme como persona decente (además me había rasurado), fui al edificio donde sería el acto inaugural del Festival de las Artes de la Rectoría. Cantamos tres canciones: abrimos con el Ciclo de la Vida, de el Rey león; siguió Les Rois du Monde y terminamos con Por ti Volaré. Los monitores no se oían y no se oía el teclado, pero bueno, no salió todo mal, siento que sólo me desafiné en alguna parte de Por ti Volaré, algo un poco raro, pues era la que mejor me sabía. Ni modo, los malditos nervios. No importa mucho, como éramos varios, los errores que cualquiera tenía apenas se notaban, además que entiendo que el sonido no jalaba bien.

Tras el acto inaugural me quedé un rato viendo las danzas polinesias que traía el campus Cuernavaca. No estaba viéndolas tanto por las chicas como piensan algunos, realmente estaba viendo el baile, tan es así que llegó el momento en que me castré (fueron muchas) y me fui a hacer un trabajo que encargó la Dra de Bases de Datos Avanzadas. Una vez más la maldita necedad me hizo tardarme un ratote, quizá 2 ó 3 horas y cacho más de lo que tardé en la parte funcional. Esa necedad la descarté. Acabé mi parte a las 18. Cerca de esa hora descubrí que "oh, no llevaba la tarjeta del banco" y que el peso que tenía en el bolsillo era lo único que tenía por el momento. No sabía cómo me iría ni en qué, pero decidí no precipitarme. Subí a ver un espectáculo musical del campus Cuernavaca en el que unos vatos (batería, bajo, saxofón, trompeta, clarinete, teclado, flauta traversa y quizá otro instrumento) tocaron jazz y la marcha eslava. Las de jazz vienen en el disco que le compré a los jazzistas de Coyoacán, fueron tres: summer dreams, a shot in the dark y alguna otra; nunca es igual oírlo en un disco a hacerlo en vivo. Fue bueno que subiera, pues ahí había algo de banda que me prestó (entre varios) cuatro pesos. A las 21 se presentaría una obra, y quería verla, pero mi condición (5 pesos en la bolsa) me hacía pensar en ello, tenía que ir a mi casa, luego al banco y luego a buscar algo para cenar (tómese en cuenta que no comí, pues estaba distraído con lo de BDA). Tras un rato de reflexión en la hora que hubo entre un evento y otro, decidí que no vería La Dama de Negro, un poco contrariado comencé a caminar rumbo a la parada. Mi sorpresa fue grande, me encontré en el camino a Mao, quien iba rumbo a la escuela porque tenía que estar hasta que acabara la obra y luego iría a Córdoba. Ahora tenía ride y podría ver la obra. Vi la obra, ya empezada, quizá llevaría 20 minutos. Me pareció buena, la mejor que vi en el festival (vi 4, 6 si cuento la de Morelia como 3: fueron tres muy breves), los dos vatos son buenos actores.

Sí, Más Pambazos Gratis :)

Acabando la obra acompañé a Mao adonde iba. Me dijo que iba al hotel Villa Florida y luego a la Braza, de modo que le pedí dinero prestado para cenar en la Braza (pambazos con carne al pastor). Llegamos al Villa Florida y no estaba la banda. Fuimos a la Braza y sólo estaba Camacho. Nos sentamos y pedimos. Después de un rato llegó el Imperdonable (hablaré de eso en otra parte). Al final, Mao comentó que pagaría lo mío y el Imperdonable, amablemente, le dijo que no, que Difusión pagaría lo mío. Supongo que fue así más que nada porque nadie más que un vato de Morelia llegó a la junta que tenían. Supuestamente estarían los jefes de staff de todos los campi. Acabó todo y fui llevado a mi hogar. Llegué y me dormí.

Imperdonable

Haciendo un breve paréntesis, comentaré sobre ese sobrenombre. Todo comenzó hace como tres meses en que le comenté al ahora llamado "imperdonable" que quería meter unos textos para el festival de las artes. Se los mandé y, tras un ratote, me dijo: "falta que les eches lápiz". Una expresión bastante ambigua. Le pregunté a qué se refería. No me dijo. Les moví un poco donde sentí que debía moverles. Le mandé de nuevo los textos, hace como un mes. No supe nada y asumí que habrían entrado. Digo, en teoría debería entrar cualquier texto que la gente les diera, sobre todo si no hacen concurso ni nada (además, en la retroalimentación el vato que habló habría mencionado, cuando mucho 8 textos juntando todos los campi). Pues le pregunté creo que el lunes y me dijo "No lo pude meter, faltaba que le echaras lápiz", de nuevo su PUTA respuesta ambigua y boba. Me molestó algo, me comentó que quería hacer algo así como un curso para escribir el semestre que viene y no me sentí ofendido ni nada, es más, probablemente lo tomaría, simplemente estaba EMPUTADO porque me dio la misma respuesta pendeja, y no me dio razón ni nada. Le comenté que bueno, la cosa es que era "cuestión de criterio y que, realmente confío algo más en el de mi hermano, quien acaba de salir de letras que en el suyo" (a mi hermano los dos textos que metí le parecieron buenos y digamos que incluso podríamos descartar el hecho de que salió de letras, y dejarlo en que ha leído un chingo, cosa que le da una visión mayor y pues él no objetó, incluso me dijo que las correcciones que le había hecho habían sido más bien de puntuación). Incluso el Imperdonable me dijo "la historia está bien y el enfoque está bien" y no sé qué más, simplemente no me dijo qué estuvo mal, que en todo caso es lo que me interesaría para mejorarlo. Igual cabe la posibilidad de que al Imperdonable no le haya gustado la manera un tanto coloquial de la "quimera" y la "oportunidad", sobre todo de la quimera, que es un diálogo común. El vato me mencionó a un tal Monterrosas que no sé quién diablos sea, ni recuerdo qué me dijo, pero era algo así como que los textos de ese tipo eran buenos. Insisto, es cuestión de criterios. Igual se me ocurre que al vato se le haya olvidado meterlos, tomando en cuenta lo increíblemente desordenado que es.

Y ya dentro del contexto, un poco ardido y un poco reflexivo, llegué a pensar de nuevo en toda la gente que no sigue su vocación real en este nuestro Mexiquito (sí, en otras ocasiones lo he pensado), los comunicólogos que lo son porque no les dejaron estudiar música o no pudieron hacerlo, o los que lo son porque no pudieron estudiar letras y que, por alguna razón, se sienten salsísimas, el vato que dio la retroalimentación de los textos es comunicólogo. Y bueno, ni qué decir, no soy yo el mejor orador, y es que disto mucho de serlo, pero el vato, que lo contaría entre los que recién mencioné (y se siente salsísima), comenzó su discurso con una de las cosas que (volviendo a la cuestión de los criterios), a mi criterio, entra entre las más sosas, (deberían ser)inusables y quizá hasta ridículas, pero que tristemente la gente asume como "adecuadas" o qué se yo. Iba más o menos como sigue: "Hoy estaba yo nervioso en mi casa porque tenía que hablar de contar historias y no sabía cómo hacerlo, " (eso no es lo soso, sino lo que sigue) "entonces le pedí a mi sobrina de cuatro años que me contara una historia" (chaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaaa, "Iba yo por Valladolid y se acercó una mujer a decirme que quería que yo fuera presidente porque...", qué diablos es eso; y gente de ese calibre dijo que la quimera era mediocre, es la clase de cosas que ponen a uno a pensar, pero bueno, sigamos con la historia del ardilla-yo) y no sé qué otras mamadas. No niego que la "historia que le contó su sobrina" (trompetilla "onomatopeyizable" en "ppprppppprrprpr") tenía algunas partes chistosas, pero creo que hubiera podido empezar de otra manera. Y volviendo, creo que es feo, sobre todo cuando alguien llega y les dice "no jala", que seguramente les pasa en algún momento.

Ahora ya se sabe por qué el "imperdonable".

Sábado de Festival

El sábado acudí a las 11 a la escuela, quedé a las 10, pero me desperté tarde y, como tenía sólo un peso en la bolsa (compré unas galletas en el intermedio de la Dama de Negro porque tenía mucha hambre), acudí al banco.
Llegué a la escuela para avanzar en el trabajo de redes. Siento que no avancé nada o casi nada, pero bueno, ahí estuve, de tal suerte que me perdí el espectáculo musical del campus Puebla (según fuentes no se presentaron). Tenía pensado subir a ver las pinturas de la banda que pintó, pero no me dejaron porque ya iban a cerrar. Me pasó lo mismo el viernes y, al final, nunca las vi.
Salí de la escuela y fui a Aurrera. Compré mi comida y la leche necesaria. Regresé a la escuela a las 17 porque, según yo, a esa hora era la "gala de danza" (erré, eso había sido el viernes, je). Había a esa hora alguna obra de teatro, pero como llegué a las 1730, ya ni me preocupé por correr. Entré a ver la obra un rato (a que terminara, probablemente antes habían pasado la de Hidalgo, pues no vi obra de Hidalgo), era de campus Chiapas. Me atrevo a decir que la chica que tenía el papel protagónico era muy mala actriz (probablemente por los nervios). Se notaba que eran líneas aprendidas.
Acabando la obra de Chiapas fue creo que la de Morelia, fueron tres obras breves, la primera fue bastante simpática, era "interactiva", la segunda estuvo simpática, también. La tercera, oh, la tercera fue la misma que presentaron los de Chiapas. ¿Por qué diablos pasará eso habiendo tantas obras? Se han escrito obras teatrales al menos los últimos quinientos años. Los de Morelia actuaban muy bien. Comentaron que es su servicio social. Es un proyecto interesante que el servicio social sea estar en taller de teatro.
Tras Morelia vino el Centro Colonial Veracruz, que presentó una obra simpática. Si tuviera que calificar las obras que vi, pondría en primero la de Puebla, seguida de las de Morelia, en tercero el Centro Colonial Veracruz y, finalmente, la de Chiapas. La cosa es que la de Veracruz no brilló no porque las actrices fueran malas, para nada, son buenas, pero la obra estaba un poco aburrida quizá, como que no exigía una gran actuación de las actrices.

En la noche habría una fiesta. Acudí a la fiesta con Lalo, Oswaldo, Luis Zurita, Carlos, el Peludito (que por cierto ha aparecido bastante en mi blog), el Duro y Luis Fernando. La fiesta estuvo simpática.
Acabando la fiesta ayudé a limpiar, así como cuando iba a la fiesta ayudé a cargar una bocina. Es un hecho que eso no me correspondía, no soy de staff, pero no me costaba nada. Ahora que en algún momento en la limpieza, decidí sentarme. Había un grupo de gente, de staff, que no estaba haciendo nada. Sólo miraban, me contrarió un poco. Fue un poco molesto cuando alguien comentó ya que habíamos acabado que le había molestado cuando me senté. Y yo le dije bastante diplomáticamente que me senté porque había gente que no estaba haciendo ni madres, y bueno, ni qué decir, volvemos a aquello de que no me correspondía ni tantito. Yo estaba ahí porque mi ride era el Peludito y, pues, él sí era de staff.
Cómo son las cosas, ¿por qué a la banda que sólo nos había mirado no le dijo nada? Respuesta: son parte del mismo grupo y conviven seguido. Es más, creo que me senté después de cargar no recuerdo qué y que un vato nos estaba mirando nada más, yo estaba cargando una mesa y le dije "Carga, ¿no?" (y se acercó alguien que sí estaba haciendo algo, creo que Oswaldo o el Peludito, incluso pudo ser Luis Zurita), comenté que "le digo a él que no está haciendo nada y sólo nos está mirando". El vato al que me referí luego como que sí se incomodó, según él, él era guía. Y pues creo que aún así tendría que limpiar, un guía es algo así como un anfitrión en esos eventos, siento que le correspondía más a él que a mí. Un guía al final es como un tipo especial de staff. Yo era un participante.
Ah, a todo esto, cené tacos gratis. Muy ricos, por cierto. Gratis porque eran parte de la fiesta y yo, como participante, tenía derecho a mis tacos gratis y a entrar a la fiesta (porque fue exclusiva de quienes participaban en el festival haciendo algo, así fuera de cargador de maletas).

Domingo: Festival de la Canción

El domingo fue el festival de la canción. Llegué a las 1730. Tuve que ir a ver si había algo de Redes para modificar o avanzar o algo, pero creo que no hubo. Llegué a media canción de un grupo del campus Chiapas. De ahí para adelante vi todo. Hubo grupos muy buenos. En especial a mí me gustó uno que no ganó nada, más que nada porque encajaba más en el tipo de música que me gusta, un rock relativamente tranquilo, digamos cercano a Héroes del Silencio. Otra que me gustó fue la de un grupo de Morelia, que llevaba varios instrumentos, ganó el mejor arreglo y el segundo lugar. Tenía algo de chunchaca y todo. Tenían bongóes, tumbadoras y un acordeón. La música estaba bastante elaborada, en contraste con el primer lugar, que se lo llevó un vato con una canción bonita que sólo tenía como instrumento un teclado (muy bien tocado). El primer lugar lo ganó merecidamente. Quizá hubiera cambiado al tercero por algún otro grupo. Como me dijo un vato "cuando vi a los de Morelia dije 'van por el primero', pero luego vi al que ganó" y pues sí, igual me pasó, la interpretación fue buena y la letra es bonita, a eso le sumaría el minimalismo de la música, cuando yo vi esa dije "pos está difícil". Tristemente el Centro Colonial Veracruz no se llevó nada :(. La triste realidad es que, cuando yo vi a los demás, sí noté que el Centro Colonial se había quedado algo corto. En la primera, por muy bien que me caiga la vocalista, no puedo negar que ni su voz ni su imagen iban con la música (un metal tranquilo), probablemente estaba nerviosa. Como que no supo cómo moverse (no es que yo sea un súper intérprete, para nada, pero por los mismos nervios estuvo parada en un mismo lado yo creo). El problema de la segunda, además de los nervios de la primera voz, habría que sumarle que no jalaban los micrófonos de las coristas. Las tres voces le daban un toque interesante, quizá yo quitaría una parte en la que parecía coro de iglesia (jalaron los tres micrófonos, y así era, pero no sé, no era de mi gusto, de hecho la gente se rió en esa parte :(, yo creo que por lo mismo) a la primera voz se le fue un gallo, pero eso no resaltó, insisto en que la canción tenía partes padres que no se oyeron y una parte sosa, que se oyó. La primera voz tiene un timbre, de repente, cercano al de la vocalista de presuntos implicados, que de hecho le da un toque de jazz, pero no lo explotaron suficiente. Ese timbre jazzesco salió muy poco. Ni modo.

Mientras los jueces deliberaban se armó el desmadre, fue a tocar el grupo que toca en el bar muu, resulta que son exalumnos y que participaron en los festivales de la canción. De las propias, tocaron una muy buena, tenía igual algo de corrido y otra tenía algo de ska, ésas me gustaron. También tocaron una que, las dos veces que he ido al susodicho bar, han tocado varias veces, en general no me gusta, pero en el desmadre cualquiera coreo. Estuvo divertido, pese a que las canciones no suelen entrar en mis gustos. Insisto, es el desmadre. Aún me duele el cuello de mover la cabeza como loco. Eso es lo feo de hacerlo.

lunes, octubre 09, 2006

Está Vivo, VIIIIIVOOOOO

Pues sí, han pasado pocas cosas en mi vida y aquí las cuento, la cosa es que ha sido bastante tiempo. Están en orden cronológico, las de más arriba ocurrieron antes. Los títulos ayudan a que, si usted lo desea, puede dejar el artículo a medias y luego seguir en donde se había quedado. No le entretengo más.

Películas

Cuando fue la semana de exámenes del primer parcial, un sábado me puse a ver películas, creo que estaba tan harto de todo que no podía hacer tarea ni estudiar. Vi tres entre el sábado y el lunes. El sábado a mediodía vi Duna y, en la tarde, Bailando en la oscuridad. El domingo en la noche vi Doce al patíbulo.
Vi Duna primero porque la había sacado en otras ocasiones. Después de Duna quise ver Doce al Patíbulo, pues se veía entretenida, sin embargo, debido a que llovía a cántaros y que la película tiene una pésima calidad de sonido (y no se oía nada), cambié la película. La realidad era que no quería ver bailando en la oscuridad porque sabía que era un drama, y no quería ver un drama. Metí entonces Eraserhead. La quité enseguida, no tenía subtítulos y, por alguna razón, me da mucha flojera ver películas completamente en inglés, como que no me gusta pensar cuando veo películas. El hecho de que la película no tenga subtítulos implica que tenga que poner más atención y quizá hasta pensar. Es por eso que quizá nunca recuerdo las películas que veo, aunque la gente me pregunte justo después de verlas. Sin más por hacer tuve que ver Bailando en la oscuridad.
Duna me pareció muy entretenida, bien hecha. Con algunas fallas, creo que abusaron en dar a conocer los pensamientos de los personajes; éso y los efectos especiales que no me explico por qué algunos eran tan malos, si ya había salido Star Wars, con algunos efectos mejores. Doce al patíbulo (Dirty Dozen) la vi hasta el domingo en la noche. Me desvelé por verla.
Doce al patíbulo me pareció simpática, siento que hay películas que han tomado parte de la idea de ésta, cuando menos Rescatando al Soldado Ryan toma parte de Dirty Dozen.
Bailando en la Oscuridad es genial, es intensa. Creo que si alguien la ve y no se conmueve es porque empezó a conmoverse y, para no hacerlo más, dejó de ponerle atención. Originalmente mi hermano nos la había recomendado. Mi hermana la sacó en una ocasión en que estábamos en el Puerto y lloró a "moco tendido" (mi hermana no es llorona). En otra ocasión la sacaron en Villahermosa y tampoco la vi. Recuerdo que la vieron mi mamá y mi hermana, yo de hecho pensé que peleaban o algo, pues de repente las oía llorar. Pero no. Fue la película. A mí se me salieron unas lágrimas en dos ocasiones. Es muy intensa.

La Graduación

El 8 de septiembre fue la graduación de mi hermano. Se me había dicho que era a las 7 y, por tanto, a las 1130 que salí de la escuela, hice apenas algo de tarea y pasé a mi casa a hacer mi maleta rápidamente. Debo haber llegado a la terminal cerca de las 13 horas, esperando que hubiera alguna corrida cerca de las 1330. Triste mi calavera cuando vi que el siguiente viaje a Xalapa era hasta las 1450. El peludito me había dicho que él iría, pero salía de la escuela a las 1430, sin embargo, en vista del horario de la terminal, era un hecho que sería mejor irme con él. Había quedado de verlo a las 15 en la gasolinera que está en la entrada al caminito de la escuela, pero llegué antes y decidí caminar a su casa.
Me invitaron a comer. Yo había comprado un negrito para pasar el hambre si me iba en ADO. Comí un muy rico pescado y una rica tortita de papa y, a eso de las 1600 salimos de Córdoba. El viaje fue entretenido. Me gusta viajar por la ruta del café. El paisaje es agradable. Llegando, le pedí que me dejara en Xalapa 2000 y accedió. Habíamos llegado a tiempo. Eran las 18. Yo debía cambiarme y rasurarme, pero no me tomaría mucho. Le hablé a mi mamá para que me pasara a mi hermana y ahí fue donde todo tronó. La ceremonia era a las 18, no a las 19. Me molestó un poco saber que no llegaría y me dio mucha pena pensar que me habían llevado hasta ahí en vano (a Xalapa 2000). Ya la banda estaba en el auditorio de Letras. Muy amablemente me acercaron los Barragán a la facultad, tomé un taxi y llegué cuando el padrino estaba hablando.
Habló muy padre, recuerdo que dijo algo que me conmovió. Recuerdo que igualmente estaba algo conmovido por la naturaleza de la ceremonia. Mi hermano se graduaba. Volvemos a aquello de que "ya somos niños grandes", que cuando subía por resbaladillas o jugábamos "mataportero" con los vecinos está a varios años de distancia. Terminó de hablar el señor y unos representantes de la especialidad de literatura dieron unas palabras, me dio risa la frase que le dedicaron a mi hermano: "Con Paco aprendimos que largas ausencias no necesariamente significan apatía", y mencionaron que en esas ausencias editó una revista extraescolar (que por cierto, los dos tomos que ha habido han sido interesantes). La chica que dijo las palabras se puso nerviosa, leyó un poco como niño de primaria, pero bueno. Luego hubo un guitarrista. Tras el guitarrista los de lengua dijeron un discurso improvisado. Finalmente un tipo (un padre de familia) aprovechó la ocasión para subirse, por sus pelotas, a agradecer a los profesores. A mi me pareció un poco raro, pero originalmente me abrí a la posibilidad de que fuera alguien importante en la escuela (eso o que se había subido a por sus pelotas). Luego descubrí que no, que efectivamente lo había hecho por sus pelotas, que han de ser bastante grandes como para haberlo hecho. Acabó la ceremonia y la banda se dirigió al asadero Cien. Alguien había pedido una mesa para todos, pero cuando llegamos vimos que era difícil que hubiera sido así, más bien era para los nuevos pasantes. Cenamos en una mesa todos. Paco, mi papá, Ángeles, mi mamá, Rita (una amiga de mi mamá), Gabriela, Diego y yo. En otra mesa estaban Jessica, Raúl, la hija de Raúl, los Palmeros Montúfar, Joaquín y su hermana, la familia de Jessica y algún perdido que olvidé. Hubo fotos, un video que no tomé (se me fue el avión y no piqué el botón), más fotos y comida. Tras la cena yo me fui con Paco y su banda. Mi mamá, Rita, Diego y mi hermana se fueron por su lado y mi papá y Ángeles se fueron al Puerto.

Primero fuimos a casa de una graduada, estuvimos ahí como media hora y nos fuimos. Íbamos Joaquín, la hermana de Joaquín, Ale y su hermano Quique (Rafa se fue yo creo que a dormir), Raúl y su señora, Paco y yo, todos en el poderoso cavalier verde. Después fuimos al submarino amarillo. Yo tenía bastante sueño, recuerdo que había dormido poco, muy poco y, además, había viajado. Salimos del submarino amarillo como a las 2. Fui llevado al departamento. A esa hora todos habían tomado apenas una o dos cervezas. Me dormí. Al día siguiente oí cuando llegó Paco. Eran como las 9. Si llegó o no pedo (que llegó bien pedo), no importa, yo sé que se la pasó a toda madre. Me dio mucho gusto que disfrutara su graduación. Al mediodía nos fuimos a comer, sin Paco, a mi me pareció bien que durmiera. Comimos en il pomodoro/postodoro. Yo pedí un calzone y una ensalada césar. No me acabé el calzone. Creo que luego fuimos a Walmart y llegamos en la noche al departamento. Fuimos a cenar tras una discusión rara en la que le doy la razón, o al menos la mayor parte, a mi hermano. Cené algo que tenía cochinita pibil en el café chiquito. Recuerdo que no estaba bien del estómago, creo que estaba un poco suelto, pero no me importó. De hecho creo que ya no lo estaba, pues no pasó nada malo cuando tiré a la banda de cabeza la siguiente vez.

El domingo mi mamá se fue como a las 9. Yo fui al puerto como a las 11. Llegué e hice unas prácticas de redes que tenía que terminar. En el camino al Puerto me pusieron "El Héroe", no terminé de verla, pero me faltó bastante poco. Es buena.

El lunes acudí a la escuela normalmente y mi semana, según recuerdo, no tuvo nada extraordinario.

Viva Méééxicooo

El viernes 15 estuve haciendo una tarea. Creo que salí de la escuela a las 6. Acompañé a Rocha a algún lado y finalmente me dejó en Aurrera. Estaba invitado a una fiesta que haría con sus amigos de infancia, pero por razones (a mi gusto obvias) le dije que no acudiría (en primera aquello de que era de sus amigos de la infancia como que me puso a pensar que estaría un poco fuera de lugar ahí) otra razón era que era probable que hiciera algo con Rubén y otra era que estaba bastante cansado. Con Rubén creo que no me entendí, el lunes me preguntó qué pasó y pues noté que discrepábamos de cómo habíamos quedado. De igual modo estaba muy cansado aquel día como para salir. Lo más cercano a la fiesta fueron los fuegos artificiales que oí de mi casa, mientras veía "El Resplandor". Estuve a punto de no terminar de ver la película, tenía mucho mucho sueño. Finalmente me dormí.
El sábado 16 me fui al Puerto, después de ver El Pianista, que la vi después de ver Forrest Gump. El Pianista es interesante. Es increíble la vida de ese tipo. No recuerdo qué hice en el puerto. Recuerdo que llegué hasta la noche, creo que me quedé dormido después de ver el pianista y conseguí boleto hasta las 2030. Forrest Gump igual es bastante entretenida.
En el camino había una película para niñas, la vi por la misma manía que me ha hecho ver varias de las películas que he visto en el ADO. Bueno, también un poco porque era de patinaje y de repente hacían cosas muy chidas, no sé, saltos con triple giro o madres así, que requieren mucha habilidad. Luego pusieron Shaolin soccer. No la acabé de ver, además que estaba en español y no se oía nada (en la otra no había problema, pues no me interesaba mucho y era absolutamente predecible).
En el plan entraba ir a Xalapa. Originalmente no quería, más que nada porque tenía tarea, pero cuando supe que como a las 6 ya estaríamos en el puerto decidí ir. Vimos a mi hermana. Paqui se había ido a celebrar el día anterior y creo que llegó y en la mañana se fue de nuevo. Nosotros llegamos a ver a mi hermana como a las 12. En teoría en los planes originales de Paco no pasaría el 16 en Xalapa, eran planes flexibles, al parecer. Fuimos a comer al café chiquito. Llegando a Veracruz creo que hice algo de tarea y luego partí a la Ciudad de los 30 caballeros.
Creo que cuando regresamos de Xalapa fuimos a comer al Varadero. Tenía mucho que no iba a éste. El restaurante es muy agradable. Regresé con boleto de las 21 a Córdoba. Ese fin de semana también debo haber visto "El hombre que sabía demasiado", también está simpática, los diálogos tienen algo de sosos, pero está bien.

Jot Roc

La semana del 18, para ser preciso, el jueves 21, acudí al Jot Roc. No lo conocía. Cuando llegamos se notaba que era puro vato con su querida o el jefe con la secre. Cosas de ese tipo. En palabras de un sabio: "ambiente secretarial". Estuvimos ahí un rato. Me la pasé bien. Fui con Yair y Barri y Fam. (Chetes, Rocha y el Puma). Todo el semestre pasado estuve jorobando a Yair para que me llevara a conocerlo. Ya lo conozco, está curioso, pero me sigue gustando más Castelo aunque tenga mucho que no voy. En castelo tocan música que se acerca más a mis gustos o entra directamente en el universo de ellos. Gasté 35 pesos más la llamada a Pablito, que terminó con el saldo de mi celular, para que finalmente el ojete no fuera. Al día siguiente llegué a mi clase de arquitectura, me dio gusto levantarme. Me dormí como a las 4:30 y me desperté a las 6:10. Total, el profe no nos habla mucho. Bases de Datos Avanzadas sí fue más pesada, por la hora, aunque hubiera dormido una hora en mi rato libre fue complicado.
Ese fin de semana, hasta el domingo que fui a Aurrera, finalmente me decidí a meterle crédito a mi celular. El maldito cajero culero no le metió el dinero a mi teléfono y, desde entonces, esos cien pesos andan bailando en el limbo. Son míos pero no puedo disponer de ellos. El lunes hablé a Banamex y me dijeron que en la noche me lo repondría el sistema. Pura madre.

Del 25 de Septiembre hacia Adelante

En ese tiempo me pasaron cosas curiosas. La primera a mencionar sería quizá que me fui de boca caminando por la calle, por suerte alcancé a meter las manos, pero eso no quita que me caí culero. Y pese a que metí las manos mi pómulo golpeó el piso, pero poquito. No me pasó nada. Sólo me lastimé la mano izquierda, como que me dio un tirón. Debería ver a un médico, pues aún siento el tirón cuando estiro mis dedos de cierta manera. Y la caída se debió a que me desperté a las 6:50 e iba a llegar tarde, entonces venía viendo hacia atrás para ver si pasaba un taxi. Yo generalmente camino por la banqueta. La moraleja de todo eso fue que, si voy a estar volteando a otro lado, mejor debo caminar en la calle, en las banquetas hay muchos desniveles. Sí llegué a la clase.
Ese martes, el martes en que me fui de boca el profe de Arquitectura dejó una tarea. La hicimos el martes y creo que se la mandamos el miércoles. Él no subió ni dio especificaciones para la tarea. Y ¡mocos! el jueves finalmente dio una especificación. Después de ir al gimnasio nos enteramos de ella. Nuestra tarea no cumplía bien con la especificación. Le mandamos un mensaje y le escribimos y el hombre no contestó. Le dije a Kart que yo la haría, pues cuando vi la especificación él ya estaba en Orizaba ya no había manera de repartirnos. De Zyanga y Yair no sabíamos nada, de Yair no sabíamos por error mío, yo tengo su celular, supongo que por el estrés se me fue el avión. No tenía crédito aún. No había tenido tiempo de ir a meterle dinero al celular. Al día siguiente iba a ser el examen de la materia y el trabajo valía parte de la calificación. No dormí del jueves 28 al 29. Todo para que el lunes el vato nos diera hasta las 18 horas para entregar la tarea. Mi equipo se encargó de modificar algunas cosas. De hecho el programa sería la mitad del examen. Dormí un rato en mi hora libre. Creo que me quedé hasta las 1630 en la escuela por la clase de coro, luego no recuerdo por qué no me fui y luego porque fui al gimnasio. Aproveché a ir porque ya tenía algo de tiempo que no iba, soy bastante inconstante. Ni modo. Era primordial que acudiera a coro, pues la semana siguiente sería el festival de las artes. Acudí, cansado y un poco desganado, pues ese martes, el mismo en que me fui de boca, acudí a teatro (por indicación de Eva, la maestra de coro) y como que noté que yo no disfrutaba tanto la clase de coro como otros. Y no es malo eso, digo, todos tenemos diferentes maneras de expresarnos y disfrutar las cosas, lo malo es que había descubierto que, en sí, yo no disfrutaba "la clase" de coro, más bien me entretenía ir por digamos "el desmadre" (que no es tan calificable como eso), no sentía haber mejorado en nada, ni siquiera en el canto. Ese día llegué temprano y, la maestra, a petición mía, me dio algún ejercicio para el ritmo. Yo creo que eso ayudó a que viera la clase de otro modo. Sin embargo, si volvemos a lo anterior, creo que no he mejorado, que sigo igual que como entré y que como estaba antes del concurso de canto del semestre pasado. Y sí, sigo sin disfrutar la clase como otros, es muy difícil que, caminando por la calle, me ponga a tararear alguna de las canciones que practicamos en la clase. Como sea ya me gusta un poco más la clase en sí.

Pambazos gratis

Cuando salí del gimnasio, como llovía, decidí ir a devolver un libro de arquitectura de desarrollo de software y, por qué no, buscar ride. Ahí estaba el amabilísimo Peludito y me dijo que sí, eso debe haber sido a las 8. Él esperaba a que la banda acabara sus labores. Yo mientras me puse a jugar madres en internet. Decidí no sacar ninguna película porque tenía la loca idea de ir el sábado a la escuela, quizá exclusivamente a sacar películas o quizá también para ir al gimnasio, es obvio que no fui. En la espera encontré un juego interesante llamado "Kung fu fighter", está curioso. Salimos a las 22 de la escuela. Yo seguía teniendo un montón de sueño, pero ahora, además, tenía hambre. No había comido, no recuerdo por qué, creo que porque olvidé que iba a ir a coro y cuando me di cuenta era hora o, al menos, ya no era una hora decente para comer (es malo comer antes de cantar, según nos ha dicho la maestra; además comí algún pambazo en el rato entre arquitecturas y BDA).
Finalmente nos fuimos de la escuela y fui llevado a la puerta de la Braza (sí, debería ser con s, mas yo no le puse el nombre). El lugar estaba lleno. Había dos mesas vacías para cuatro personas. Yo tomé una para esperar los dos pambazos que pedí para llevar. Me dieron las tostadas con frijol y todo y, al poco rato, llegó una familia grande. No iban a caber ni a madres en la mesa de cuatro. Entonces hice lo más normal: les cedí mi mesa y me paré a esperar. En eso, un señor (que se llama Rodolfo Zapata Tiburcio) me invitó a sentarme con él. Me pareció amable de su parte. Y entonces empezó a decirme que yo había cometido un gesto muy amable al ceder mi mesa, y que era raro que alguien de mi edad hiciera algo así. Me contó de su familia, entiendo que vive relativamente cerca de mi casa. Tiene una nieta que estudia derecho y otras cosas. El señor estaba entre los 60 y 70 años. Me dijo que pidiera lo que quisiera, que él me lo pagaría sólo por haber cedido la mesa. Me pareció amigable, pero le dije que ya había pedido. Él insistió en que pidiera algo más, para comer ahí, que cenara y yo me llevara los pambazos a la casa. Decliné su invitación a pedir más, no pedí nada, y el señor me invitó los pambazos. Le agradecí y me fui. Él también estaba por irse, canceló su orden porque no lo atendían, estaba algo molesto con la banda de la braza. Llegué a la casa y cené. Fue bueno, pues sólo tenía 20 pesos en el bolsillo y ya no los tuve que gastar.

El fin de semana dormí como tenía mucho no lo hacía. El sábado creo que sólo salí a Aurrera hasta las 18 horas y eso sólo porque no tenía nada para comer y se me había acabado el cereal.
El domingo hice la tarea-examen de lenguajes de programación y fui al internet a buscar una pregunta que me faltaba. Recuerdo que ese viernes no me bañé, digo, ni siquiera dormí. Como no había gas, creo que el sábado también me abstuve, había frío. El domingo me bañé por decencia y sólo por éso. De hecho el sábado iba a bañarme en la noche, pero me quedé dormido. El domingo lo hice por decencia porque descubrí que el viernes había ido al gimnasio. Era yo un asco.